El juez de guardia Antonio Piña decidió enviar ayer a prisión a Rafael Liliner Gómez, en concepto de autor, y a José Pereira Pérez, como cooperador, por su presunta participación en el asalto a dos empleadas del Eroski de la calle Vila Real el pasado lunes.
Mientras que el primero no reconoció el delito -se lo endilgó a dos conocidos que le pidieron que los trasladase en coche hasta O Couto-, el segundo, quien está casado con una trabajadora de ese supermercado, colaboró con el juez e implicó al primero. Según dijo, acudieron el lunes a las ocho de la mañana a la calle Vila Real y aguardaron pacientemente a que dos de las empleadas salieran del supermercado con la recaudación, poco antes de las doce de la mañana. Según añadió, actuaron ese día porque sabían que guardaban el dinero del fin de semana y que el botín podría ser más elevado (robaron 20.000 euros).
Asimismo, reconoció que su parte del botín (algo más de 5.000 euros) los arrojó a un contenedor de basura cercano al domicilio de Alejandro Pedrosa toda vez que quiso desentenderse del asunto. Un hecho que deberá determinar el juzgado de ahí que vaya a oficiar a Sogama para examinar la basura retirada en esa calle al objeto de poder encontrar el dinero.
Ambos fueron enviados a prisión por su supuesta participación en este asalto pero las diligencias prcvias abierta por el juzgado tratarán de determinar si también tuvieron que ver con el atraco a punta de pistola al Eroski de O Couto el 10 diciembre y el asalto a una joyería de Lamas Carvajal en julio, tal como sostiene la policía.
Rafael Liliner, de origen venezolano, y José Pereira vivían en la vivienda de este último. El primero resultó lesionado al tratar de huir de los agentes de ahí que tuviera que declarar en silla de ruedas.
