Tras dos jornadas más convulsas en una serie de líneas de la provincia, el transporte escolar volvió a la normalidad al final del segundo día de implantación de nuevo Plan de Transporte. La Consellería de Infraestruturas e Mobilidade ya anunció que estará "vixiante" para que no se produzcan nuevos problemas, ya que ayer y el miércoles sufrieron las consecuencias de los problemas de coordinación de algunas empresas de nuevo los alumnos del CEIP Seixalbo.
Los últimos inconvenientes se dieron en dos líneas entre Paderne, San Cibrao y el colegio, que volvió a llegar tarde y provocó retrasos en la llegada al colegio. También en el CEIP Antonio Faílde volvieron a registrar algún retraso.
Una vez solventados, se espera que reine ahora la normalidad, y Mobilidade resaltó que la "prioridade absoluta" es la atención "preferente e correcta" a los escolares. Por ello, ayer insistían en que se dieron "instrucións claras" a la empresa para adoptar medidas que garanticen que el traslado de niños "se produza sempre en tempo e forma", algo que no ocurrió en esos dos centros en las dos primeras jornadas.
La Xunta está "vixiante" ante estos problemas, pero destacó que el cambio llegó con un clima general de "normalidade" en toda la comunidad autónoma.
Desde el miércoles, coincidiendo con la vuelta a clase, se pusieron en marcha casi 2.000 nuevos contratos de transporte, con 1.400 líneas de autobús compartido, que registraron solo la incidencia de esas dos rutas, que la Xunta achaca a un "fallo na coordinación da empresa concesionaria".
En la jornada de ayer, pese a los retrasos iniciales, los progenitores contactados por este periódico hablaban ya de un servicio "normal" por la tarde, con puntualidad y acompañantes en todas las rutas de Seixalbo o Coles.
Algunas madres seguían lamentando "que o cambio de acompañantes e autobuses se fixese a metade de curso", por los problemas de adaptación de los más pequeños.
Sin embargo, la renovación de las concesiones, que tenía previsto llevarse a cabo el pasado mes de agosto, tuvo que postergarse debido a impugnaciones del conurso interpuestas por el sector del transporte.
Críticas de la oposición, que tacha de "caos" lo vivido en algunas rutas
La oposición en el Parlamento criticó ayer el "caos" vivido en algunas rutas escolares. Noa Presas, diputada del BNG, pidió explicaciones por lo sucedido ayer con los escolares de Paderne que iban al colegio de Seixalbo, y afeó a la Xunta que dejase la responsabilidad de coordinar todo "en man das empresas". La nacionalista ven "inxustificable" que hubiera problemas dos días seguidos, algo que relacionaron con la "improvisación e falta de planificación por parte da Xunta". "Hai autobuses que circularon sen acompañantes e as crianzas tiveron que ir amoreados nun único autobús como se fosen gando", criticó Presas
El BNG de la Baixa Limia puso como ejemplo a Verea y pidió a los concellos que "informen" sobre los cambios de líneas.
Por su parte, Davide Rodríguez, de En Marea, criticó el "amontoamento" por falta de plazas, además de los retrasos, la falta de acompañantes y otros problemas. Rodríguez cifró en "máis de 50" la cifra de niños que no pudo ir a clase el miércoles por no ir el autobús a recogerlos, y afeó a la Xunta que sean los niños "os que sofren as consecuencias dun plan apresurado":
La Xunta invertirá 70 millones anuales durante la próxima década en este Plan del Transprote, que estará "plenamente implantado" en 2020. para garantir que Galicia teña transporte público de calidade durante a próxima década a través dun plan que estará plenamente implantado no ano 2020.
