La provincia registró su récord de pernoctaciones en establecimientos hoteleros durante el mes de julio. Los hoteles ourensanos contabilizaron más de 68.000 durante el séptimo mes del año. Esto, a pesar de que el número de turistas decreció. Pero ahora duermen más noches.
Es la principal conclusión que se extrae de la encuesta de ocupación hotelera que publicó ayer el Instituto Nacional de Estadística, que recoge cifras tanto a nivel provincial como de la ciudad. Precisamente, la capital provincial fue la que más viajeros perdió. Este año, julio dejó 11.394 visitantes, casi un millar menos que el año pasado y 2.259 menos que antes de la pandemia. Sin embargo, la estancia media de los turistas alcanza los dos días -el máximo histórico- y deja cifras de récord en las pernoctaciones, que rozaron las 23.000.
En el resto de la provincia sí que se incrementaron los viajeros. Los hoteles de los otros 91 concellos acogieron 21.226 huéspedes, un 3,3% más que el año pasado, aunque menos que en la pandemia.
El cómputo total de la provincia arroja resultados positivos, con todos estos datos en la mano. El descenso de viajeros en la ciudad no impide que la evolución de las pernoctaciones sea positiva y anote un dato histórico, superior incluso al de 2019, cuando se contabilizaron casi 67.000. Esto, a pesar de que la tendencia a nivel autonómico es negativa, con un descenso de las estancias del 1,7%.
La evolución contradice la del sector hostelero a nivel autonómico. Solo con los datos de julio, los hoteles gallegos atendieron un 3,9% menos de viajeros, registrando también bajadas; pero las pernoctaciones también cayeron, a diferencia de Ourense. En concreto, acusaron un descenso del 1,7%.
En lo que va de año, en la provincia se hospedaron ya 187.630 viajeros, un 3,5% más que el año pasado; y las pernoctaciones fueron 366.080, un 7% más. En la ciudad se alojaron 74.195 turistas, un 0,7% menos, que pernoctaron en 138.988 ocasiones, un 3,6% más.
La Xunta destaca que la provincia mejoró las estadísticas anteriores a la pandemia
La Xunta destacó, en reacción a los datos publicados por el INE, sendos incrementos del 8% y del 6% en el número de turistas que visitaron Galicia y del 6% en el número de noches. Es la evolución resultante de comparar los datos del acumulado de los primeros siete meses del año con el mismo periodo del año anterior.
A pesar de la bajada de pernoctaciones y viajeros en el mes de julio, desde la administración autonómica resaltan un aumento del acumulado que califican de “notable”. Además, afirman que el crecimiento permite a los establecimientos gallegos “situarse por enriba dos niveis previos á pandemia, alcanzando un máximo da serie histórica neste período de sete meses”.
El 72% de las pernoctaciones se corresponden con visitantes procedentes de otros puntos de España. De esta fracción, los turistas procedentes de la misma Galicia suponen el 24% del total, tal y como desgranan desde la Xunta. Pero observan un “forte incremento” del turismo extranjero y señalan que “alcanza un máximo da serie histórica dos primeiros sete meses do ano tanto en volume, con case 1,4 millóns de noites, como en peso, co 28% do total da demanda”.
Ourense tan solo representa el 7% del total gallego de noches hoteleras. Lugo es la siguiente provincia, con un 12%, mientras que, más de lejos, Pontevedra representa el 35% y A Coruña acapara casi la mitad con un 45%.
Por último, desde la administración autonómica subrayan que los establecimientos hoteleros de A Coruña, Lugo y Ourense “conseguen superar os niveis de 2019”, hasta ahora entre los más elevados.
