El público ourensano disfrutó ayer de la magia del ballet clásico a través de uno de los espectáculos más conocidos, El cascanueces, al que puso música Piort Ilich Chaikovski en 1890.
El Ballet Clásico de Lviv representó ayer esta obra en el Teatro Principal de la ciudad, con Anastasia Isupova y Eugen Svetlitsa como solistas principales.
El cascanueces tiene como protagonista a una niña, Clara, que en una fiesta navideña recibe como regalo de su tío Drosselmeyer un cascanueces con forma de soldado.
El cascanueces tiene como protagonista a una niña, Clara, que en una fiesta navideña recibe como regalo de su tío Drosselmeyer un cascanueces con forma de soldado.