La llegada de la credencial de diputado provincial para Manuel Baltar Blanco, ayer por la mañana a la Diputación, agiliza el relevo en la presidencia de la institución, tras la renuncia, el pasado viernes, de su padre, José Luis Baltar.
Baltar Blanco viajará hoy a Santiago para asistir a una recepción que el Parlamento hace al presidente del Senado, Pío García Escudero, pero no está confirmado que hoy presente la renuncia a su escaño en el Parlamento gallego, que puede compatibilizar unos días, hasta que tome posesión de su cargo como diputado provincial, lo que hará en el pleno en el que se proceda a su investidura como presidente.
Precisamente, ese pleno está todavía sin convocar pero fuentes de la Diputación han precisado que probablemente no se celebre hasta la próxima semana. Ya no dará tiempo a convocarlo para mañana, jueves; el viernes no podrá ser porque hay pleno municipal en el Concello donde varios diputados, incluido el presidente en funciones de la Diputación, Rosendo Fernández, son también concejales. Y el sábado se ha descartado ya la semana pasada, a petición de los diputados socialistas, que se desplazarán a Sevilla para participar en el congreso federal.
La sesión de investidura tendrá que celebrarse, pues, en uno de los tres primeros días de la próxima semana, ya que la legislación vigente establece que ha de producirse en un plazo máximo de 10 días hábiles a partir de la sesión en la que se da constancia oficial de la renuncia del anterior presidente, lo que ocurrió el pasado viernes. Ese mismo día ya se pidió la credencial de diputado a favor de Baltar Blanco.
Precisamente, ese pleno está todavía sin convocar pero fuentes de la Diputación han precisado que probablemente no se celebre hasta la próxima semana. Ya no dará tiempo a convocarlo para mañana, jueves; el viernes no podrá ser porque hay pleno municipal en el Concello donde varios diputados, incluido el presidente en funciones de la Diputación, Rosendo Fernández, son también concejales. Y el sábado se ha descartado ya la semana pasada, a petición de los diputados socialistas, que se desplazarán a Sevilla para participar en el congreso federal.
La sesión de investidura tendrá que celebrarse, pues, en uno de los tres primeros días de la próxima semana, ya que la legislación vigente establece que ha de producirse en un plazo máximo de 10 días hábiles a partir de la sesión en la que se da constancia oficial de la renuncia del anterior presidente, lo que ocurrió el pasado viernes. Ese mismo día ya se pidió la credencial de diputado a favor de Baltar Blanco.
