La cifra de viviendas nuevas a la venta cayó en Ourense un 7,12% durante el año pasado, cifra que supone el mayor descenso porcentual en Galicia, aunque es también la provincia gallega con menor stock pendiente de venta. Así lo reflejan los datos que acaba de publicar el Ministerio de Fomento, relativos al año 2011.
Así, al cierre del pasado, se contabilizaban 3.663 viviendas nuevas sin vender en Ourense, cuando un año antes representaban 3.944. Una circunstancia que el sector atribuye fundamentalmente a que no se construye obra nueva, porque el ritmo de ventas de la ya existente es lento.
En Galicia, la provincia que acumula más pisos y casas sin vender es A Coruña, con 16.524, un 3,74% menos que un año antes. Le sigue Pontevedra, con 12.405, cifra que se redujo un 5,47% a lo largo de 2011. Finalmente, en Lugo hay 4.868 viviendas nuevas pendientes de comercializar, un 3,3% menos que al cierre de 2010.
En España, el total de viviendas nuevas sin vender se situó en 2011 en 676.038, tras un descenso del 1,67%. La bolsa de residencias nuevas se reduce por segundo año consecutivo, después de alcanzar su máximo en 2009, con 688.044 unidades. En todo caso, se trata de niveles muy superiores a los que se registraban antes del estallido de la burbuja inmobiliaria. De hecho, en 2005, el stock pendiente de venta era de poco más de 195.000 viviendas.
Además, la mitad de los pisos y casas sin vender se acumulan en las provincias de la costa mediterránea. Los casos más significativos son los de Barcelona -con más de 60.000 unidades- y Castellón -que supera las 54.000-, seguido de Alicante, que se aproxima a las 50.000. También registra un volumen importante Madrid, con más de 45.000 inmuebles, y Toledo, con 26.000.
El informe refleja el peso de las viviendas a la venta con respecto al total de la provincia. En Ourense, la bolsa de vivienda nueva a la venta supone un 1,67% de los inmuebles residenciales existentes, porcentaje similar a otras provincias de interior de baja densidad de población y mercado de segunda residencia poco activo. De hecho, la proporción de Ourense es la menor de Galicia (donde la media está en el 2,34%), y está por debajo de la media nacional (2,6%). Entre las provincias que tienen un mayor porcentaje de inmuebles residenciales a los que no dan salida destaca el caso de Castellón, donde 12 de cada 100 pisos y casas están sin vender. Le siguen Almería y Toledo, que superan el 6%.
En Galicia, la provincia que acumula más pisos y casas sin vender es A Coruña, con 16.524, un 3,74% menos que un año antes. Le sigue Pontevedra, con 12.405, cifra que se redujo un 5,47% a lo largo de 2011. Finalmente, en Lugo hay 4.868 viviendas nuevas pendientes de comercializar, un 3,3% menos que al cierre de 2010.
En España, el total de viviendas nuevas sin vender se situó en 2011 en 676.038, tras un descenso del 1,67%. La bolsa de residencias nuevas se reduce por segundo año consecutivo, después de alcanzar su máximo en 2009, con 688.044 unidades. En todo caso, se trata de niveles muy superiores a los que se registraban antes del estallido de la burbuja inmobiliaria. De hecho, en 2005, el stock pendiente de venta era de poco más de 195.000 viviendas.
Además, la mitad de los pisos y casas sin vender se acumulan en las provincias de la costa mediterránea. Los casos más significativos son los de Barcelona -con más de 60.000 unidades- y Castellón -que supera las 54.000-, seguido de Alicante, que se aproxima a las 50.000. También registra un volumen importante Madrid, con más de 45.000 inmuebles, y Toledo, con 26.000.
El informe refleja el peso de las viviendas a la venta con respecto al total de la provincia. En Ourense, la bolsa de vivienda nueva a la venta supone un 1,67% de los inmuebles residenciales existentes, porcentaje similar a otras provincias de interior de baja densidad de población y mercado de segunda residencia poco activo. De hecho, la proporción de Ourense es la menor de Galicia (donde la media está en el 2,34%), y está por debajo de la media nacional (2,6%). Entre las provincias que tienen un mayor porcentaje de inmuebles residenciales a los que no dan salida destaca el caso de Castellón, donde 12 de cada 100 pisos y casas están sin vender. Le siguen Almería y Toledo, que superan el 6%.
