El bono del Gobierno disparó un 20% el uso de carburante

El alza de precios a la hora de pasar por caja en las gasolineras no parece estar afectando a los conductores ourensanos a la hora de pensarse coger el vehículo, lo que parece alimentar la teoría de que los niveles de movilidad han dejado atrás los avatares de la pandemia del covid. Así lo reflejan las cifras de ventas en las estaciones de servicio de la provincia del primer cuatrimestre del año, período en el que se despacharon 60.382 toneladas de combustible, una cifra algo inferior pero muy similar a la que se registraba en los mismos meses de 2019, cuando el precio por cada litro era muy reducido en comparación con el del presente año, que se ha visto afectado por el conflicto bélico en Ucrania. En abril de 2019, el coste andaba en 1,35 euros para la gasolina y en 1,28 para el diésel, mientras que tres años después, se disparaba a 1,82 y 1,85 euros, respectivamente. No obstante, para tratar de amortiguar esa escalada de precios, el Gobierno aprobaba la medida de bonificar con 20 céntimos cada litro de combustible, una decisión que tuvo impacto en los conductores, al indicar las estadísticas de consumo que este se disparó casi un 20% entre marzo y abril, al pasar de 14.214 a 17.050 toneladas, coincidiendo también con la eliminación de todas las restricciones por la pandemia y las vacaciones de Semana Santa. Por tipo de combustible, el diésel continúa siendo el producto más utilizado en los surtidores de la provincia, ya que de la cantidad total despachada, 14.363 toneladas fueron de gasóleo A, mientras que la gasolina 95 se quedó en 2.528 toneladas vendidas en el cuarto mes del año. Evolución Aunque todavía se desconoce la evolución de la venta de combustibles en gasolineras desde abril hasta la actualidad, lo que sí no consiguió el bono de 20 céntimos del Ejecutivo estatal (que sigue en vigor) fue frenar el alza del precio de gasolina y diésel, que en junio superaba la barrera de los dos euros, llegando a alcanzar en la provincia una media de 2,19 euros el litro de gasolina y 2,13 el de diésel. Hace unas dos semanas, se tocaba techo y desde entonces se está experimentando una ligera tendencia a la baja del coste del litro de combustible, que ha bajado de media 11 céntimos en el caso de la gasolina 95 y 10 en el del gasóleo, lo que les deja por encima de la barrera simbólica de los dos euros. Con todo, en los últimos días, según el portal oficial del Ministerio de Transición Ecológica, ya hay estaciones de servicio en Ourense que tienen ambos combustibles a menos de dos euros el litro, especialmente en el caso del diésel. Gran diferencia Sangrante es la comparativa de precios respecto al verano de 2021. Hace justo un año -sin tener en cuenta la bonificación estatal que se aplica al pasar por caja-, el litro de gasolinera 95 estaba 65 céntimos más barato, mientras que la diferencia del diésel era de 72 céntimos.