La incertidumbre sobre los ingresos de la Cámara de Comercio a partir del próximo año -después de que un real decreto de diciembre de 2010 eliminase la obligatoriedad de que las empresas abonen cuotas a esta institución- motivó que en la sesión plenaria de ayer se retirase del orden del día la aprobación inicial de los presupuestos del próximo año que, según la normativa, debería realizarse antes de que termine octubre. No obstante, han solicitado a la Dirección Xeral de Comercio una prórroga que permita definir mejor sus ingresos.
Así, una de las principales fuentes para obtener recursos en adelante será la prestación de servicios a empresas, pero aún está sin definir cuáles serán. El Consejo Superior de Cámaras ha presentado una propuesta al respecto, pero prevé que no se decidirá hasta que tome posesión el Gobierno que resulte elegido el próximo 20 de noviembre.
El presupuesto depende también del plan de actuación que van a acordar las nueve Cámaras gallegas. Asimismo, el citado decreto establece que en 2012 solo tendrán que abonar cuotas empresas que facturen más de 10 millones de euros. No obstante, el presidente de la Cámara ourensana, Celso Barbosa, indica que la cifra de empresas en esta entidad es similar a la de las Cámaras de A Coruña y Vigo, pero éstas tienen muchas más con una facturación superior a 10 millones. Para el resto de empresas, la pertenencia a las Cámaras será voluntaria, si bien el Consejo Superior acordó que las que opten por asociarse no paguen cuota en 2012 (la de años posteriores están por definir). De hecho, la entidad ourensana iniciará ya la información sobre los servicios que presta (en áreas como emprendimiento, medio ambiente, formación profesional y otras) para inscribir socios ya desde principios de 2012.
En todo caso, la Cámara ourensana prevé mantener su cifra de empleados (20), ya que 'todos son necesarios'. Sobre el pago de cuotas en el presente año (en el que las empresas todavía deben abonarlas), Barbosa indica que la recaudación está en un 47%, si bien aún está abierto el plazo de pago. Es un porcentaje algo menor al de otros años por esta fecha, que Barbosa atribuye a las dificultades por la situación económica, más que rechazo al pago de cuotas. Añade que tienen pendientes ayudas europeas por programas desarrollados hace dos años y que aún no han cobrado. Además, apunta que están dedicando parte de los ingresos a reservas para próximos ejercicios.
El presupuesto depende también del plan de actuación que van a acordar las nueve Cámaras gallegas. Asimismo, el citado decreto establece que en 2012 solo tendrán que abonar cuotas empresas que facturen más de 10 millones de euros. No obstante, el presidente de la Cámara ourensana, Celso Barbosa, indica que la cifra de empresas en esta entidad es similar a la de las Cámaras de A Coruña y Vigo, pero éstas tienen muchas más con una facturación superior a 10 millones. Para el resto de empresas, la pertenencia a las Cámaras será voluntaria, si bien el Consejo Superior acordó que las que opten por asociarse no paguen cuota en 2012 (la de años posteriores están por definir). De hecho, la entidad ourensana iniciará ya la información sobre los servicios que presta (en áreas como emprendimiento, medio ambiente, formación profesional y otras) para inscribir socios ya desde principios de 2012.
En todo caso, la Cámara ourensana prevé mantener su cifra de empleados (20), ya que 'todos son necesarios'. Sobre el pago de cuotas en el presente año (en el que las empresas todavía deben abonarlas), Barbosa indica que la recaudación está en un 47%, si bien aún está abierto el plazo de pago. Es un porcentaje algo menor al de otros años por esta fecha, que Barbosa atribuye a las dificultades por la situación económica, más que rechazo al pago de cuotas. Añade que tienen pendientes ayudas europeas por programas desarrollados hace dos años y que aún no han cobrado. Además, apunta que están dedicando parte de los ingresos a reservas para próximos ejercicios.
