Decenas de fans no pudieron entrar hasta ya comenzada la actuación
Y Rosendo se despidió, en teoría para siempre, sin defraudar a sus fans en las Fiestas de Ourense dejando un muy buen sabor de boca, con todos sus clásicos. No faltó ni uno, lo que sirvió para mitigar el cabreo que muchoS de los fans mostraron antes, durante y después de uno de los conciertos estrella de la semana festiva. Eso sí, sin causar altercados de ningún tipo.
Con cuatro portones de acceso al Xardín do Posío, solo uno permaneció abierto para permitir la entrada a los fans. Y eso que a media tarde del miércoles, las entradas de internet estaban agotadas, lo que auguraba una gran afluencia.
Y esto generó problemas. Se formó una importante aglomeración hasta la cima de la rúa Coruña, lo que hizo que decenas de fans no pudieran entrar hasta ya comenzada la actuación. Con silbidos y protestas, solo a pocos minutos de iniciar el concierto, la organización decidió abrir otro portón.
A esto se unió el problema con la impresión de tickets o con la lectura de los mismos. Y los problemas no se quedaron ahí. La sorpresa fue mayúscula en el interior del recinto. Con la ciudad volcada, muchos tuvieron que olvidarse de refrescarse las gargantas, debido a que una sola barra se encargaba de abastecer a los miles de asistentes.
Fuentes del Concello descargaban ayer responsabilidades en la empresa gestora de entradas y aseguraban que se había solicitado un informe al respecto. Aseguran que se superaron las expectativas de público, con más de 3.000 personas y rechazan que hubiera "caos". Al parecer, la empresa organizadora no había impreso el suficiente número de entradas y tuvo problemas con los lectores de códigos de barras.
Críticas políticas
Desde el BNG, calificaron de "despropósito" lo acontecido, que se convirtió en "un auténtico caos", que solo salvaron los fans, dijeron los nacionalistas, "porque souberon estar á altura". Por ello, pidieron a Belén Iglesias, como titular de Cultura, una "disculpa pública".
En OUeC, atacaron las "evidentes deficiencias" para seleccionar espacios, ya que a los "problemas de accesibilidade" al Posío, se sumaron colas en el concierto de Los Secretos, lo que demuestra una "falta de coordinación e innovación", que se suma "ao innumerable currículo de desagravios" de Belén Iglesias, a quien volvieron a pedir su dimisión.
