En caso de querer utilizar una plaza, se debe pedir una tarjeta en la sede

El Concello restringe a personal autorizado los aparcamientos junto a la Policía Local

Las 13 plazas de aparcamiento libre que había en la calle Victoria Kent, colindante con el edificio de la Polícia Local, han quedado restringidas para vehículos autorizados. A partir de ahora, las plazas quedan reservadas a personas que acudan a hacer gestiones a la sede policial o, incluso, a los vecinos pero con la necesidad de solicitar la tarjeta acreditativa en el edificio policial.
Por motivos de seguridad y a fin de tener controlados los vehículos, la calle Victoria Kent, colindante con el nuevo edificio de la Policía Local, deja de ser de libre aparcamiento y restringe los estacionamientos a vehículos autorizados. Una señal vertical recoge ya esta limitación desde el pasado domingo, aunque no será hasta hoy cuando la restricción sea efectiva, una vez que se complete con la señalización horizontal. Esta medida afecta a un total de 13 plazas de aparcamiento, lo que ha generado el malestar de los vecinos de esta zona del barrio de A Ponte. El concejal de Tráfico, el nacionalista Fernando Varela, justifica su puesta en marcha en que se trata de una calle incluida en el perímetro de seguridad del edificio policial. Puntualiza, sin embargo, que la restricción del apar camiento a ‘vehículos autorizados’ no significa que sea una zona de estacionamientos para la Policía Local, sino que queda reservada para aquellas personas que acudan al lugar para hacer gestiones en la sede e, incluso, para los propios vecinos. Eso sí, para poder aparcar es necesario justificar los motivos de la estancia en el edificio de la Policía Local, donde se dispensará la tarjeta acreditativa, que el usuario de la plaza debe colocar en su vehículo.

Malestar vecinal por la falta de plazas

Fue el pasado domingo cuando una brigada de Tráfico colocó en la calle Victoria Kent la señal vertical con la que se prohíbe el estacionamiento ‘agás a vehículos autorizados’. El malestar vecinal no se ha hecho esperar y han criticado esta medida porque, dicen, dificulta aún más los aparcamientos en una zona donde ya existen problemas para encontrar una plaza donde dejar el coche. El concejal de Tráfico, que incide en que también podrán aparcar los vecinos, sostiene que lo que buscan con esta medida es que la Policía Local, dado que la calle está en el perímetro de seguridad, tenga conocimiento de quién aparca allí y qué está haciendo (de ahí la necesidad de solicitar la tarjeta en la sede), además de favorecer la rotación de vehículos.


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