El mercado laboral ourensano vive años de cambio, en los que algunas de sus principales profesiones entraron en una época de ostracismo, a raíz de varios factores. Mientras, otras ocupaciones transitan el camino inverso, y no dejan de ganar afiliados mes tras mes. Uno de los grandes símbolos de la economía española durante el cambio de milenio, la construcción, es una de la que más sufre, al igual que ocurre con la agricultura, que junto al mundo rural atraviesa momentos delicados.
La construcción perdió en los últimos diez años al 16% de sus trabajadores, ya que pasó de dar sustento a 10.028 ourensanos en agosto de 2012 a los 8.375 con los que cerró el mes pasado. Es decir, 1.635 puestos de trabajo perdidos, que son aún más si se extiende el análisis hasta 2009, cuando vivían del ladrillo 14.044 personas. A partir de esta fecha, que coincide con el pinchazo de la burbuja inmobiliaria, el descenso es constante, y el contexto actual tampoco invita al optimismo, puesto que la falta de mano de obra, la crisis de suministros y el aumento de costes acechan a la profesión.
En lo que respecta a la agricultura, la caída de trabajadores en la década es del 18%, ya que de los 5.429 con los que contaba entonces quedan ahora 4.469. La caída de la profesión en la provincia se concentra a finales de 2011, cuando perdió 900 trabajadores durante los últimos meses. La decana del Colegio de Economistas de Ourense, Carmen Sampayo, afirma que el sector debe afrontar una “reordenación” relacionada “coa escaseza de auga nalgunas zonas”.
También experimentaron importantes caídas las actividades financieras y las industrias extractivas, mientras que tres de los pilares ourensanos se mantienen: el comercio, la hostelería y la industria manufacturera.
Ciencia, educación y transporte son las que más crecieron en el decenio
Mientras algunas de las profesiones tradicionales languidecen, otras sacan músculo, y pocas ilustran esta situación como la educación, que en los últimos diez años vio como sus trabajadores crecían un 75%. Según los datos de la Seguridad Social, en 2009 había un total de 2.400 ourensanos que vivían de la enseñanza, una cifra que se elevó hasta los 4.219 de la actualidad.
Las “actividades profesionales científicas y técnicas” también experimentaron un auge en este periodo, y su cifra de trabajadores subió un 23%, hasta alcanzar los 3.822 de la actualidad.
El transporte es otro sector que vive un buen momento, de hecho este año alcanzó el mejor nivel de empleo de su historia, con 5.150 trabajadores. Diez años atrás, la cifra era de 4.039, por lo que el incremento es del 28%. Otra actividad que crece es la sanidad, que ya es la tercera ocupación predominante con 13.654 trabajadores.
