La crecida del Sil obliga a cerrar la playa fluvial y el Miño se acerca a los umbrales de advertencia
Las lluvias incesantes han cambiado la imagen de los ríos de forma integral respecto a hace apenas unos meses. De la sequía se ha pasado a la amenaza de desbordamientos. El nivel de caudal se intensifica, los embalses están ya a un nivel superior a su media histórica y cualquier apertura de compuertas ante un nivel de agua almacenada muy alto amenaza con superar los umbrales de alerta de los cauces.
No es algo extraordinario, como confirman las fuentes consultadas, pero tras un marzo extremadamente lluvioso, el progresivo crecimiento de los cauces hacen temer un regreso a los desbordamientos. De momento, fuentes de la Confederación Hidrográfica Miño-Sil descartaban que se fuera a producir esa situación, aunque si el tiempo continúa igual y con los embalses casi al límite de su capacidad, la persistencia de las lluvias sí amenaza con agravarla.
El río Miño llegó a rozar ya el umbral para la activación de la prealerta, que se sitúa en cinco metros de altura del agua. En algunos momentos, alcanzó 4,94 metros de agua y de seguir la tendencia podría sobrepasarse el nivel mínimo.
El río Sil a su paso por O Barco de Valdeorras también causó los primeros problemas. Superó en algunos momentos los 7,20 metros de altitud y la Policía Local tuvo que cerrar la playa fluvial del Malecón de la villa debido a la crecida del río, que llego a sobrepasar ya las escalerillas de acceso a la playa.
Desbordado el Arnoia a su paso por Baños de Molgas, con más lluvias en el horizonte
Otros ríos de la provincia también han aumentado mucho el nivel del río. El Limia alcanzaba su máximo del último mes y llegaba a superar los 1,30 metros de nivel de agua, cuando el nivel necesario para activar las precauciones se produce al superar los dos metros de altura. El río Arnoia, a su paso por el núcleo de A Arnoia, estaba todavía muy lejos de los umbrales de alerta.
No ocurría lo mismo con el Arnoia a su paso por Baños de Molgas, que lleva varios días ya desbordado y que el fin de semana podría ir a peor ante las predicciones meteorológicas.
A expensas de más lluvias estaba el río Avia a su paso por O Ribeiro que, si bien no había sobrepasado los límites, llevaba un nivel muy alto, que hace presagiar que podría llegar a traer problemas.
En cuanto a otros ríos de la ciudad, tanto el Loña como el Barbaña, presentaban unos caudales bastante altos, que no se veían desde la situación previa a la declaración de prealerta por sequía.
Ante la posibilidad de que sigan aumentando los caudales, solo queda mirar al cielo. De los últimos 35 días contabilizados, ha llovido en 28. Y parece que no es probable que la tendencia vaya a frenarse. Las predicciones meteorológicas apuntan a que hoy volverán los cielos despejados, aunque de forma transitoria. Mañana volverán las lluvias, que serán persistentes en Ourense durante todo el fin de semana.
Lo que sí se notará durante el paso de los días es la mejora en las temperaturas, ya que las máxima podrían llegar tanto el sábado como el domingo a los 20 grados de temperatura. .
