La proximidad del 22-M se ha colado en el proyecto de Ourense para crear un hospital universitario. Aprovechando la coyuntura, grupos de presión coruñeses intentan frustrar la acreditación para que el Complexo Hospitalario de Ourense (CHOU) imparta docencia a los alumnos de Medicina y mostrar así a la opinión pública la histórica aspiración de la Universidade de A Coruña de incluir en su oferta formativa una facultad del ramo.
El presidente de la Comisión de Docencia del CHOU, Jesús García Mata, que reconoce esta situación, no duda en vincular las presiones a una estrategia propia del actual 'contexto preelectoral', en el que a ciertos sectores políticos 'les interesa potenciar y defender A Coruña y Vigo por encima de Ourense y Lugo porque son capitales con muchos más votos por conquistar, con vistas al próximo 22 de mayo'.
La acreditación para poner en marcha el futuro hospital universitario depende todavía del visto bueno de una comisión mixta, integrada por la Consellería de Educación, Sergas y representantes de las universidades de A Coruña y Vigo. Un trámite para hacer realidad el proyecto por el que ya se había arrancado el compromiso previo de la Xunta. Tanto es así, que el programa de la reunión que todavía queda pendiente de celebrar entre la comisión mixta y la Universidad de Vigo se centra en aspectos docentes, como 'concretar las materias a impartir y otros aspectos relacionados con los cambios derivados del Plan Bolonia', explica García Mata. Según estas previsiones y la garantía de la Consellería de Educación de dar luz verde a la acreditación, la Comisión de Docencia del hospital ha convocado durante la Semana Santa a todos los jefes de servicio para ir estructurando y adaptando el sistema docente.
La guerra iniciada desde A Coruña, mediante la que también se pretende excluir de la docencia médica al hospital Lucus Augusti, se ha recibido en Ourense como una reacción visceral 'sin base lógica'. García Mata indica que 'nuestra capacidad docente no podría competir con la de A Coruña porque sólo impartiremos algunas asignaturas y a un grupo pequeño de alumnos, por lo que no supondríamos ni un perjuicio, ni un beneficio' para los intereses coruñeses. Asimismo, el hospital ourensano tampoco entra en el conflicto abierto desde Santiago sobre la idoneidad o no de impartir clases teóricas en otros centros, como se pretende en A Coruña, ya que Ourense se limitará a la formación eminentemente práctica.
En la actualidad, 88 médicos internos residentes (Mir) se forman en diversas especialidades, que se suman al de los 40 que hacen lo propio en Atención Primaria. Con la creación del hospital universitario se incluirá un nuevo grupo de alumnos de 'pregrado', según la denominación del nuevo sistema impuesto por Bolonia, cuyo número todavía está por determinar.
La acreditación para poner en marcha el futuro hospital universitario depende todavía del visto bueno de una comisión mixta, integrada por la Consellería de Educación, Sergas y representantes de las universidades de A Coruña y Vigo. Un trámite para hacer realidad el proyecto por el que ya se había arrancado el compromiso previo de la Xunta. Tanto es así, que el programa de la reunión que todavía queda pendiente de celebrar entre la comisión mixta y la Universidad de Vigo se centra en aspectos docentes, como 'concretar las materias a impartir y otros aspectos relacionados con los cambios derivados del Plan Bolonia', explica García Mata. Según estas previsiones y la garantía de la Consellería de Educación de dar luz verde a la acreditación, la Comisión de Docencia del hospital ha convocado durante la Semana Santa a todos los jefes de servicio para ir estructurando y adaptando el sistema docente.
La guerra iniciada desde A Coruña, mediante la que también se pretende excluir de la docencia médica al hospital Lucus Augusti, se ha recibido en Ourense como una reacción visceral 'sin base lógica'. García Mata indica que 'nuestra capacidad docente no podría competir con la de A Coruña porque sólo impartiremos algunas asignaturas y a un grupo pequeño de alumnos, por lo que no supondríamos ni un perjuicio, ni un beneficio' para los intereses coruñeses. Asimismo, el hospital ourensano tampoco entra en el conflicto abierto desde Santiago sobre la idoneidad o no de impartir clases teóricas en otros centros, como se pretende en A Coruña, ya que Ourense se limitará a la formación eminentemente práctica.
En la actualidad, 88 médicos internos residentes (Mir) se forman en diversas especialidades, que se suman al de los 40 que hacen lo propio en Atención Primaria. Con la creación del hospital universitario se incluirá un nuevo grupo de alumnos de 'pregrado', según la denominación del nuevo sistema impuesto por Bolonia, cuyo número todavía está por determinar.
