A menos de 20 días para el sorteo especial de Navidad, las administraciones de lotería ven con escepticismo la marcha de las ventas.
El problema surge no tanto en ventanilla como en las reservas. 'No es normal que a estas alturas se venda tan poco. Supongo que es la crisis', señala Jorge Anta, desde la administración número 2, en la calle Paseo. El problema se suscita en las reservas porque han dejado de solicitar números para realizar participaciones muchas pequeñas empresas que han cerrado en el último año como consecuencia de la crisis económica. Pese a ello, La Región ha vendido ya toda su lotería e hizo lo propio la cafetería Sil, contra la que se empotró recientemente una conductora con su coche.
Otro tanto ha ocurrido con clubes deportivos, asociaciones, o comisiones de fiestas. Rosa Bermejo, de la administración número 4, en la calle Ervedelo, señala que 'los clubes deportivos, que llevaban muchas cantidades, les recortaron las subvenciones y ahora tienen problemas. Desaparecieron empresas de la construcción, de granitos, etcétera'. Y aparece un problema añadido, en el que coinciden todos los loteros: 'Caixanova, que antes nos cogía cantidades de lotería a todas las administraciones, este año no ha hecho lotería pensando en la fusión con Caixagalicia, que, en cambio, sí que vende participaciones'.
Que en grandes cantidades falla la venta, lo admite también Fina Álvarez, de la administración número 3, en la avenida das Caldas. 'Mantengo la venta por ventanilla, pero las reservas que hacían las comisiones de fiestas han caído mucho; y han cerrado empresas, como algunas de automóviles, que este año no me han cogido'.
Nacho Muguerza, de la administración número 8, en la avenida de la Habana, sospecha que este año 'va a haber más devoluciones', aunque advierte que 'la gente lo deja todo para el final. La paga extraordinaria debe animar la venta'. Este lotero lo otorga cierta importancia al spot publicitario del sorteo de Navidad, hasta cuya emisión 'la venta estaba completamente parada. Ahora parece que emerge'.
El nivel de ventas no es distinto en las villas de la provincia. Acaso parezca más agravada. 'Aquí la cosa está más floja que otros años. Los bares y las comisiones de fiestas que antes vendían muy bien, este año van muy atrasados. Vamos a bajar todos', se teme Daniel Soto, de la administración número 1 de Ribadavia. ¿Cuánto? 'Calculo que entre un cinco y un 10 por ciento. Todo depende de lo que devuelvan las asociaciones'. En la número 1 de Verín, José Manuel González se encomienda 'a las fechas del puente, cuando es habitual que se lleven muchos números para fuera de la provincia. Estos días deben ser un revulsivo'.
José Pío Álvarez, de la administración número 1 de Celanova, no tiene problemas en reconocer que 'yo estoy más o menos igual que el año pasado. Se nota algo de bajón porque Caixanova no ha hecho lotería, y era un gran cliente. Pero quitando eso, más o menos igual'.
Otro tanto ha ocurrido con clubes deportivos, asociaciones, o comisiones de fiestas. Rosa Bermejo, de la administración número 4, en la calle Ervedelo, señala que 'los clubes deportivos, que llevaban muchas cantidades, les recortaron las subvenciones y ahora tienen problemas. Desaparecieron empresas de la construcción, de granitos, etcétera'. Y aparece un problema añadido, en el que coinciden todos los loteros: 'Caixanova, que antes nos cogía cantidades de lotería a todas las administraciones, este año no ha hecho lotería pensando en la fusión con Caixagalicia, que, en cambio, sí que vende participaciones'.
Que en grandes cantidades falla la venta, lo admite también Fina Álvarez, de la administración número 3, en la avenida das Caldas. 'Mantengo la venta por ventanilla, pero las reservas que hacían las comisiones de fiestas han caído mucho; y han cerrado empresas, como algunas de automóviles, que este año no me han cogido'.
Nacho Muguerza, de la administración número 8, en la avenida de la Habana, sospecha que este año 'va a haber más devoluciones', aunque advierte que 'la gente lo deja todo para el final. La paga extraordinaria debe animar la venta'. Este lotero lo otorga cierta importancia al spot publicitario del sorteo de Navidad, hasta cuya emisión 'la venta estaba completamente parada. Ahora parece que emerge'.
El nivel de ventas no es distinto en las villas de la provincia. Acaso parezca más agravada. 'Aquí la cosa está más floja que otros años. Los bares y las comisiones de fiestas que antes vendían muy bien, este año van muy atrasados. Vamos a bajar todos', se teme Daniel Soto, de la administración número 1 de Ribadavia. ¿Cuánto? 'Calculo que entre un cinco y un 10 por ciento. Todo depende de lo que devuelvan las asociaciones'. En la número 1 de Verín, José Manuel González se encomienda 'a las fechas del puente, cuando es habitual que se lleven muchos números para fuera de la provincia. Estos días deben ser un revulsivo'.
José Pío Álvarez, de la administración número 1 de Celanova, no tiene problemas en reconocer que 'yo estoy más o menos igual que el año pasado. Se nota algo de bajón porque Caixanova no ha hecho lotería, y era un gran cliente. Pero quitando eso, más o menos igual'.
