ANÁLISIS DE LOS EMBALSES

La sequía se desactiva 15 meses más tarde, pero regresará con frecuencia

La Oficina Técnica de la CHMS se reunió por última vez pero advierte a Ourense de que ha de crear un plan contra este problema

La sequía quedó oficialmente totalmente desactivada en la provincia de Ourense ayer, una vez que la Oficina Técnica de la Sequía de la Confederación Hidrográfica Miño-Sil (CHMS) analizó los indicadores hídricos de lluvias, ríos y embalses, tras un mes de marzo "espectacular", tal y como calificó el presidente de la CHMS, Francisco Marín. 

La histórica situación de 15 meses en situación de prealerta (más alerta durante cinco meses) dijo adiós definitivamente. Sin embargo, se fue para volver, y lo hará más pronto que tarde. Así lo corroboraron los técnicos durante la reunión de la Oficina Técnica, tras la cual certificaron que el cambio climático "está teniendo mucho que ver" y que, pese a que la situación actual en Ourense y toda la demarcación Miño-Sil están en máximos, se volverá a vivir una escasez de lluvias en próximas épocas. "La sequía se va a repetir", aseguró Marín. 

Por ello, volvió a lanzar un tirón de orejas a los municipios de más de 20.000 habitantes, conminándolos a que elaboran cuanto antes los planes especiales de sequía, en forma de protocolo para hacer frente a las situación de escasez. Tal y como confirmó ayer Marín, "solo Ponferrada ha hecho caso, aunque entregó solamente un borrador" del futuro plan a realizar. 

"Las administraciones debemos estar mejor preparados para afrontar las próximas situaciones de sequía, que serán más frecuentes ante los efectos del cambio climático. Tendrán que modificarse los protocolos para alertar a la población", subrayó Marín. 


MES DE MARZO "ESPECTACULAR"


Las lluvias caídas durante el mes de marzo, que fue, como ya contó este periódico, el "segundo más lluvioso desde el año 2001", han cambiado la situación de toda la cuenca hidrográfica. La precipitación caída durante los seis meses transcurridos de año hidrológico "fue mayor que la media de los últimos 30 años", destacó Marín. Esto hizo que, sin lugar a dudas, decidieron decretar de nuevo el "estado de normalidad" y desactivar la Oficina Técnica de la Sequía, que dejará de reunirse. A partir de ahora, será la Oficina de Planificación Hidrológica la que llevará los controles, como ya hacía antes de esta extraordinaria situación. 

Con las lluvias de los últimos meses, los acuíferos "están en gran parte de los casos por encima de la media", y los ríos llevan más del doble de agua de lo normal (un 134% más en Ourense).  Además, la CHMS ha podido cumplir en solo tres meses las cuotas mínimas de agua que ha de dejar pasar hacia Portugal, tal y como exige el Convenio da Albufeira. Si el mínimo anual es de 3.700 hm3, hoy ya se han dejado pasar 4.400 hm3. 

El último sistema que permanecía hasta ayer completamente en alerta por sequía era el Sil Inferior, que afectaba a toda la zona oriental de la provincia, y que ha pasado ya a normalidad total.


DESBORDAMIENTOS


De momento no hay peligro de desbordamientos, y de superar el denominado nivel de alerta. Hay tres niveles de advertencia sobre los posibles desbordamientos. En este caso, hay nivel de activación, de prealerta y de alerta. 

En el caso del río Miño, cuando se supera el nivel de activación, que está en 5 metros de altura de agua a su paso por la ciudad, suelen anegarse todas las zonas de senderos de las márgenes del río y se activa la coordinación con todas las autoridades, porque puede "ser peligroso", indicó Marín. 

En el caso de sobrepasar la prealerta, se anegarían las zonas de la pista roja del pase a ambos lados del Miño. Por último, en caso de superarse el nivel de alerta, se llegaría a la situación más complicada, con la inundación de la N-120 a su paso por la ciudad. Cualquier tipo de desbordamiento, sin embargo, "haría poco daño en Ourense", dijo Marín, en comparación con otras urbes, debido a que aquí "los ríos tienen mucha velocidad". 


DESHIELO


En la CHMS confirmaron que preocupa el deshielo en la cabecera del río Sil, de cara a estos posibles desbordamientos, aunque aseguraron que está todo calculado y medido. De momento, confirmaron que el Limia, que se desbordó hace años en múltiples ocasiones, no ha sufrido de momento ese fenómeno. 


GALICIA ABANDONA LA SEQUÍA Y VUELVE A LA NORMALIDAD


No solo la CHMS decretó el fin de la sequía en Ourense, Lugo, y sus áreas de influencia en Pontevedra, sino que la misma decisión adoptó ayer la otra Oficina Técnica de la Sequía, de la  demarcación Galicia Costa. Los técnicos constataron también en esa zona la recuperación del caudal base de los ríos , mientras que los embalses están también por encima de la media de los últimos años. La situación más crítica llegó a finales de 2017, cuando toda Galicia llegó a estar en alerta por sequía. A partir de ese mes, comenzaron a llegar las borrascas, que incrementaron los recursos en todo el territorio y que permitieron alcanzar de nuevo la normalidad. 

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