La policía arrestó a otras 17 personas en diferentes provincias tras recibir denuncias de particulares

Detenidos dos ourensanos por difundir pornografía infantil

Un policía experto en pornografía infantil buscando archivos en la red
Dos vecinos de la ciudad, identificados como J.P.G., de 37 años, y M.LF, de 43, fueron detenidos dentro de una macrooperación a nivel nacional por tenencia y distribución de pornografía infantil a través de internet. Los arrestos se llevaron a cabo el pasado mes de junio, aunque ambos quedaron en libertad con cargos tras prestar declaración en el Juzgado de Guardia. La Policía Nacional les intervino durante un registro de sus domicilios cuatro ordenadores, cinco discos duros y varias tarjetas con memoria, que en la actualidad están siendo rastreadas por los policías expertos en delitos informáticos.
Pero no fueron los únicos detenidos dentro de la operación, dado que los agentes arrestaron en los últimos tres meses a otras 17 personas e imputaron a otras 16 por el mismo delito de tenencia y distribución de pornografía infantil en la red.


SOLTEROS Y UNA VIDA NORMAL

La investigación se inició el pasado mes de mayo en el marco de la 'Operación Litoral' después de que varios particulares, según dio a conocer la propia Policía Nacional, denunciaran imágenes de menores desnudos con un alto contenido pedófilo. Además de Ourense, se practicaron arrestos e imputaciones en Barcelona (20), Tarragona (3), Lérida y Gerona (2), Madrid (2), Granada, Vizcaya, Tenerife, Valencia, Zaragoza y Murcia.

Según dieron a conocer fuentes de la investigación, la mayor parte de los detenidos e imputados están solteros, tienen edades comprendidas entre los 35 y 60 años, conocimientos de informática a nivel usuario y un entorno familiar normal.

La investigación se inició tras analizar las denuncias recibidas en la dirección de correo denuncias.pornografí[email protected], en las que los ciudadanos informaron de diferentes archivos de contenido pedófilo localizados en su navegación en internet.


INTERCAMBIO

Los investigadores utilizaron las fotografías y vídeos recibidos que contenían abusos sobre menores para identificar a los internautas, que compartían el material pornográfico a través de las aplicaciones de intercambio de archivos.

En los registros efectuados, los agentes intervinieron abundante material informático (101 discos duros, 2.719 soportes ópticos, 12 ordenadores portátiles, 5 ordenadores de sobremesa, 4 tarjetas de memoria y 2 videocámaras) con archivos de imagen y vídeo de contenido pedófilo. El material está siendo analizado por los investigadores con el fin de tratar de identificar a los menores víctimas de abusos sexuales recogidos en las distintas grabaciones o fotografías.

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