La Policía Nacional detuvo el pasado martes a Marcos Alfonso D.D.S. (40 años) por entrar a robar a una casa deshabitada en la localidad de Ceboliño, en la ciudad. No obstante, no consiguió su propósito porque los agentes frustraron sus intenciones al ser alertados por un vecino colindante que escuchó ruidos (la fractura de una ventana) en el inmueble asaltado.
Los hechos ocurrieron sobre las diez de la noche. El supuesto ladrón, tras escuchar la llegada de los policías, se ocultó bajo la cama de un dormitorio emplazado en la primera planta.
Para acceder a la vivienda, Marcos Alfonso D.D.S. tuvo que saltar el muro de dos metros que cerca la finca. Accedió al inmueble rompiendo con una piedra un ventana de la parte de atrás y forzando la persiana, según sospechan los agentes que acudieron al lugar.
Los policías, tras inspeccionar el sótano y la primera planta, hallaron en el segundo piso cajones de un cómoda abiertos en una de las habitaciones. Precisamente, debajo de la cama de ese cuarto se había escondido Marcos Alfonso para intentar ocultarse de las fuerzas de seguridad, quienes se identificaron varias veces durante el registro de la casa.
El detenido confesó a los agentes que había entrado a la vivienda porque la dueña le debía dinero.
CLAVO EN EL PIE
Asimismo, tuvo que ser trasladado al Complexo Hospitalario de Ourense porque al saltar se clavó un clavo en el pie.
El detenido fue puesto a disposición judicial y quedó en libertad con cargos, imputado en un delito de robo con fuerza en las cosas.
Para acceder a la vivienda, Marcos Alfonso D.D.S. tuvo que saltar el muro de dos metros que cerca la finca. Accedió al inmueble rompiendo con una piedra un ventana de la parte de atrás y forzando la persiana, según sospechan los agentes que acudieron al lugar.
Los policías, tras inspeccionar el sótano y la primera planta, hallaron en el segundo piso cajones de un cómoda abiertos en una de las habitaciones. Precisamente, debajo de la cama de ese cuarto se había escondido Marcos Alfonso para intentar ocultarse de las fuerzas de seguridad, quienes se identificaron varias veces durante el registro de la casa.
El detenido confesó a los agentes que había entrado a la vivienda porque la dueña le debía dinero.
CLAVO EN EL PIE
Asimismo, tuvo que ser trasladado al Complexo Hospitalario de Ourense porque al saltar se clavó un clavo en el pie.
El detenido fue puesto a disposición judicial y quedó en libertad con cargos, imputado en un delito de robo con fuerza en las cosas.
