La entrada de aire cálido desde el Norte de África dejará mañana temperaturas veraniegas en Ourense, aunque será algo pasajero con la vuelta a la inestabilidad propia de la primavera en la primera semana de mayo. Hasta 30 grados se prevén en la ciudad durante la jornada dominical, lo que sería la máxima de este año 2020 (el 23 de febrero los termómetros alcanzaron los 26,1 grados centígrados). Desde el punto de visto meteorológico, según valora Juan Taboada, se da un fenómeno curioso: "Tuvimos un mes de abril pro debajo de las expectativas, algo más lluvioso de lo normal e inestable, pero borrasca que entró el pasado miércoles desaparece, dando paso a cielos despejados este sábado, pero otra borrasca que se acerca por el Atlántico hace de motor, antes de llegar, para favorecer la entrada de aire cálido", explica desde MeteoGalicia Juan Taboada.
El anticiclón del domingo no se va a quedar y los 30 grados tampoco. Los expertos no aprecian, a corto plazo, un cambio de tendencia con respecto al mes precedente,por lo que el tiempo será cambiante. Es decir, "no vemos un anticiclón en forma de cuña que quede seis o siete días", añade Taboada.
En cuanto a las mínimas, experimentarán un moderado descenso: de mínimas de 14 grados de estos últimos días a los nueve previsto para el domingo.
Aunque los 30 grados del domingo están considerados valores altos para esta época del año, no son inusuales registros incluso más elevados con el mes de mayo más avanzado. El récord de los últimos 50 años está en el año 2001, con 37.4 grados centígrados el 29 de mayo.
En el resto de Galicia, el domingo será cálido: 28 grados en Pontevedra, 26 en Vigo y Lugo y 24 en A Coruña.
