El mercado medieval, con 15.000 visitantes, acaparó la mayor participación

Los espectáculos de las recientes Festas de Ourense atrajeron casi 70.000 ciudadanos

Casi 70.000 ciudadanos asistieron a los espectáculos de las Festas de Ourense, siendo el mercado medieval (15.000 visitantes), la batalla de flores (10.000) y las casetas gastronómicas (10.000), los de mayor afluencia.
La resaca de las Festas del Corpus llega para el Concello en forma de balance. Los índices de participación en las actividades festivas ha dejado buen sabor de boca en la Concejalía de Cultura. Según los cálculos que maneja el departamento y que ayer presentó la edil Isabel Pérez, un total de 69.960 espectadores participaron en las fiestas de la ciudad, lo que los organizadores califican como ‘elevada participación’.

El mercado medieval con 15.000 asistentes, así como la batalla de flores y las casetas gastronómicas con 10.000 visitantes cada uno de los ellos, fueron los eventos con más seguidores, mientras que los espectáculos pirotécnicos fueron seguidos por 6.000 personas. Entre los espectáculos musicales, los que más calaron en la ciudadanía fueron los conciertos de Amaral y Chámalle Xis con 4.000 asistentes, el ‘Ourense dance’ con otros tantos y el concierto de Los Suaves, con 3.000 espectadores. Por su parte, el programa ‘Máis música’, novedoso en esta edición, se quedó en 1.500 personas entre los cuatro recintos musicales, los mismos que Manolo García en el concierto que dio en el Paco Paz.

Pérez reconoció que ‘ó mellor hai que replantexar alguna actividade de tipo musical ou os espazos’, si bien hizo hincapié en que ‘unha festa son máis que concertos’ y mostró su satisfacción por la respuesta que tuvieron tanto las actividades infantiles (1.100 niños participaron en la ‘Caixiña dos mixtos’) como las de mayores. ‘O teatro de rúa, as bandas municipais e as corais tiveron moitísima participación’, indicó Pérez (más de 3.000 asistentes).

Desde el PP mostraron ayer su satisfacción porque el Concello ‘manteña iniciativas montadas polo PP como o mercado medieval e as casetas gastronómicas, aínda que con outra filosofía’. Si bien, Pepe Araújo lamentó ‘a falla de ambiente festivo na cidade porque non había conexión entre as distintas actividades’, y que ‘non sexan festas participativas, senon que a xente é só espectadora do que acontece’, así como el ‘elevado prezo’ de los conciertos.


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