Los robos se registraron el pasado día 3 de junio y una cámara de videovigilancia recogió el rostro de los asaltantes
Uno de los tres detenidos, identificado como J.J.R.R., de 32 años, en un operativo conjunto de la Guardia Civil y Policía Nacional tras robar nueve locales comerciales (fruterías) en menos de cinco horas, había sido trabajador de una empresa de frutas asentada en el polígono Barreiros (San Cibrao), que fue la primera en ser asaltada.
El detenido, que ingresó en prisión tras declarar en el juzgado de guardia, conocía que el dueño de la empresa de fruta tenía puntos de venta en la ciudad y A Valenzá (Barbadás). Además, las fuerzas de seguridad le intervinieron, según pudo saber este periódico, planos con la ubicación concreta y accesos de cada uno de los negocios.
En las instalaciones de la empresa del polígono Barreriros, tras robar dinero en efectivo, siete pagarés nominativos y caja de caudales, sustrajo las llaves de cada uno de los puntos de venta. Después, la ejecución de cada uno de los asaltos resultó fácil. El único problema era que apareciera por el lugar el empresario o alguno de sus actuales trabajadores. "Ante el resto de viandantes, pasaban desapercibidos porque creían que se trataban de empleados manejando cajas de fruta para iniciar el reparto", afirmaron fuentes de la investigación.
Los robos se registraron el pasado día 3 de junio y una cámara de videovigilancia recogió el rostro de los asaltantes. Los agentes ya los tenían identificados al día siguiente, pero esperaron hasta el pasado día 23 para detenerlos ante la sospecha de que tenían previsto realizar más robos y sorprenderlos en el interior de los negocios.
Los tres presuntos delincuentes tras los nuevo robos se refugiaron en Trives, de donde son naturales. Los compañeros del organizador de los robos, J.B.R., de 30, y J.G.A., de 31, quedaron en libertad tras declarar en el juzgado, aunque en calidad de investigados.
