Una nueva edición de la Festa dos Fachós llenó de fuego y gastronomía la villa de Castro Caldelas. Medio millar de manojos de paja pero también más de 2.000 chorizos y 500 litros de vino honraron al fuego y a San Sebastián.

Los fachós de Caldelas honran a San Sebastián

Decenas de personas conducen los fachós por el casco antiguo, entre numerosísimo público. (Foto: XESUS FARIÑAS)
Más de 500 fachós ardieron ayer en la tradicional fiesta de Castro Caldelas, que prologa la festividad de San Sebastián.
Fue, de nuevo, una auténtica exaltación del fuego y de la gastronomía de la comarca de Caldelas, a base de excelentes chorizos y vino de la Ribeira Sacra, acompañado todo con pan del Castro. La Festa dos Fachós comenzó cuando anochecía y se prolongó hasta altas horas de la madrugada, siempre rodeada de fuego y buena comida. Se degustaron cerca de 2.500 chorizos y más de 500 litros de vino, que puso la organización a disposición de vecinos y visitantes, que disfrutaron de una de las fiestas con más prolongada tradición en la provincia de Ourense.

La fiesta comenzó con la tradicional procesión por el casco antiguo de Caldelas, precedida del San Sebastián de paja y el fachón grande, de unos 30 metros de altura.

Se cree que la fiesta recuerda a una gran peste que azotó la comarca de Caldelas en el año 1763. Se empleó entonces el fuego para combatir la enfermedad y evitar su propagación. Otra leyenda asegura que Dios se apareció a vecinos de la villa y les comunicó que la peste desaparecería si, además, levantaban una iglesia en honor de San Sebastián, de ahí que la Festa dos Fachós vaya aparejada a este santo. Toda la actividad festiva se desarrolla en el entorno del castillo medieval de la localidad, centro neurálgico de la villa.

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