La empresa concesionaria de la residencia ya había solicitado la reapertura del espacio universitario.
La urbanización del entorno de la residencia universitaria de As Lagoas, finalizada ya y pendiente del visto bueno del Concello de Ourense, desbloquea la reapertura del espacio universitario, un paso que ya solicitó la empresa concesionaria de esta residencia, Siresa, al propio Consistorio.
Las obras, en un espacio de aproximadamente 4.500 metros cuadrados, están plenamente terminadas por la junta de compensación que liderala promotora Casas Orens y ya fueron, pues, puestas a disposición del Concello, a quien corresponde recepcionarlas. Incluyen el vial de conexión con la calle Asunción, a la que se da así continuidad; un vial de acceso a la residencia; un aparcamiento exterior para 40 plazas; zonas verdes; renovada red de abastecimiento de agua; red de alumbrado; y riego, gas y renovación de telefonía; y todos los elementos, señala Jesús Taibo, gerente de la junta de compensación, para la reapertura del recinto universitario con plenas condiciones de seguridad.
Se ha hecho, pues, dice, todo lo que tenía que haberse ejecutado cuando se construyó la residencia, que ya lleva cerrada por sentencia judicial desde hace más de un año. Y en este punto, cuestiona la licencia de apertura del recinto que otorgó la exconcejala de Urbanismo, Aurea Soto, "en contra de los informes desfavorables del servicio de Ingeniería del Concello". Por este motivo, agrega, hay un pleito abierto por Casas Orense, antigua propietaria de los terrenos, que imputa a la exedil un delito de prevaricación, pendiente actualmente de un recurso ante la Audiencia. Las obras de urbanización costaron, según la junta, 775.000 euros, asumidos por los propietarios.
Según el programa de fases presentado en el Concello, ahora las obras continuarán con la reurbanización de toda la calle de la Asunción y la apertura de un vial de acceso a Otero Pedrayo. Esto permitirá una circulación perimetral rodada y peatonal, descongestionando el tráfico e integrando en la trama urbana una zona de difícil acceso. Y se derribarán las tres viviendas del polígono cuyos propietarios ya han sido trasladados.
