Cuatro socios, todos de origen venezolano, fueron ayer juzgados en la Audiencia Provincial por la comisión de una serie de robos en varias viviendas de la provincia, asaltos para los que presuntamente aprovecharon la celebración de fiestas patronales en las inmediaciones de Carballiño o en la zona de O Ribeiro.
La fiscal acusa al grupo de un delito continuado de robo con fuerza en cuatro casas habitadas pidiendo, en función de su participación en los asaltos, desde dos a cuatro años y medio de cárcel.
Los componentes del grupo, José Antonio M.M., Miguel Alberto M.C., Samanta Y.L. y Katherin C.M., habrían participado conjuntamente en el asalto a una vivienda de Seoane, en la que violentaron la puerta y se llevaron distintos objetos además de 4.200 euros en efectivo.
La fiscal también considera su participación en un robo en una casa de Maside, de la que extrajeron un teléfono, dos televisores, dos ordenadores, una máquina de afeitar, una tablet, joyas, gafas de sol, un bolso y 4.450 euros en metálico. De José Antonio M.M. y Katherin C.M. considera además que participaron en un robo en Moldes (Boborás), y José Antonio M.M. en compañía de Miguel Alberto M.C. y Samanta Y.L. en otro en Brués (Boborás). Además, en la vivienda de Samanta y Miguel Alberto se recuperó en su momento tras su detención una cadena de oro, unos pendientes y un medallón desaparecidos en los asaltos.
La fiscal pide para José Antonio M.M. una pena de cuatro años y seis meses de prisión y para Katherin C.M., tres años. Los acusados podrían ser sin embargo ser expulsados del territorio nacional, con la prohibición de regresar durante un periodo de cinco años.
Por otra parte, a Miguel Alberto M.C. y Samanta Y.L. se les aplicó la atenuante de confesión por declarar en su momento la infracción a las autoridades antes de conocer el procedimiento judicial que se dirigía contra ellos. Su petición de pena sería así de dos años y seis meses de prisión para él y dos años para ella.
