La noche y el amanecer en la provincia de Ourense fue notablemente menos frío que en las últimas jornadas. Aún con puntos bajo cero, especialmente en las zonas de montaña, la situación se normalizó y la ola de frío polar se contuvo. Como ejemplo, en la ciudad de Ourense se pasó de los -4,2 de mínima de ayer a los 4,8 de esta madrugada.
Como temperaturas mínimas, hay que destacar Manzaneda, donde el "mercurio" bajó hasta los -7,4 grados. En otros municipios como Calvos de Randín o Baltar, que llegaron a alcanzar dobles dígitos negativos durante el viernes y el sábado, la jornada dejó una mínima de -2,5 y -2 respectivamente.
En Verín, otro de los puntos más fríos en plena ola polar, también un "respiro" con una mínima de -2,6 lejos de los menos de 10 grados negativos que llegaron a alcanzar hace solo 24 horas.
Una tregua que se antoja pasajera. Las previsiones avanzan un tiempo seco y más frío a partir de mañana.