Un fuego forestal declarado al filo de las cinco de la tarde de ayer en una zona de monte raso emplazada entre las localidades de O Casal y Codesás, en la parroquia de Quins (Melón), alarmó a los vecinos del entorno ante la posibilidad de que las llamas pudiesen llegar a alcanzar sus viviendas.
El foco del fuego, situado a menos de 400 metros de un grupo de casas, pudo quedar controlado antes de que el incendio afectase a los inmuebles más próximos a las llamas, después de que se movilizasen al lugar tres motobombas, cuatro brigadas, un agente forestal, un helicóptero y una avioneta.
El incendio, aunque apenas calcinó una hectárea de superficie forestal arbolada, causó un notable desasosiego entre los habitantes de la zona, que colaboraron en las tareas de extinción con el fin de lograr sofocar las llamas antes de que llegasen a amenazar sus moradas.
Fuentes municipales confirmaron que aún a última hora de ayer permanecía un retén en el lugar para que el fuego no se reavivase y, asimismo, agradecieron la colaboración vecinal para evitar que el incendio llegase a suponer un peligro.
LA ACTUACIÓN
El fuego pudo quedar controlado apenas una hora después de iniciarse, según confirmaron fuentes de Medio Rural. Aunque se habían movilizado más efectivos del Concello, finalmente no llegaron a intervenir en la zona dado que las llamas pudieron ser sofocadas por los brigadistas de la Xunta.
Estos últimos refrigeraron el área afectada por el fuego forestal, originado por causas que se desconocen con exactitud, durante más de media hora, con el fin de que las llamas no pudiesen rebrotar.
El incendio, aunque apenas calcinó una hectárea de superficie forestal arbolada, causó un notable desasosiego entre los habitantes de la zona, que colaboraron en las tareas de extinción con el fin de lograr sofocar las llamas antes de que llegasen a amenazar sus moradas.
Fuentes municipales confirmaron que aún a última hora de ayer permanecía un retén en el lugar para que el fuego no se reavivase y, asimismo, agradecieron la colaboración vecinal para evitar que el incendio llegase a suponer un peligro.
LA ACTUACIÓN
El fuego pudo quedar controlado apenas una hora después de iniciarse, según confirmaron fuentes de Medio Rural. Aunque se habían movilizado más efectivos del Concello, finalmente no llegaron a intervenir en la zona dado que las llamas pudieron ser sofocadas por los brigadistas de la Xunta.
Estos últimos refrigeraron el área afectada por el fuego forestal, originado por causas que se desconocen con exactitud, durante más de media hora, con el fin de que las llamas no pudiesen rebrotar.
