Un incendio redujo a cenizas la chabola en que vivían tres hermanos en la zona conocida como Canelle, en el barrio ourensano de O Vinteún. Las llamas comenzaron poco antes de las nueve y media de la mañana y se propagaron con rapidez por la estructura del inmueble, en el que predominaba la madera. La combustión generó una densa columna de humo, que era perfectamente visible desde distintos puntos de la ciudad. "Quedamos en la calle. Nos ardió todo lo que teníamos. No sé donde vamos a pasar la noche", aseguraba Alejandra Escudero, recordando que era la única que estaba en la chabola. "Mis dos hermanos habían salido y no se como comenzó el fuego", lamentaba.
Al lugar acudieron varias patrullas de la Policía Local y dos unidades de los bomberos, que daban por apagado el incendio poco antes del mediodía. Mientras, los agentes inspeccionaban los rescoldos para determinar las causas que provocaron el fuego.
En el paraje, en el que crecen abundantes árboles y maleza, residen más personas en sus respectivas chabolas. Todas ellas están atentas a primera hora de la tarde de ayer a lo que quedó del inmueble ardido ante el elevado riesgo de que se reavivasen los rescoldos y se propagasen por la maleza. Entre el humo se observaba los restos de la nevera carbonizados, lavadora, cocina, colchones, ropa calzado y resto de electrodomésticos y enseres de los tres hermanos. "Cáritas ya nos facilitó algo de ropa y alimentos", aseguraba Alejandra Escudero, al tiempo que guardaba las bolsas con el material que le facilitó el colectivo religioso.
La familia lleva casi 40 años residiendo en el lugar. Ayer, Escudero Dual apelaba a la solidaridad de la población y del Concello ourensano para reconstruir su chabola. "No pedimos que nos den una casa ni nada parecido. Lo único que precisamos es madera para la reconstrucción. Si alguien nos trae madera se lo agradeceremos porque quedamos en la calle, con la ropa que teníamos puesta".
De la obra se encargaría la misma familia, que esperaba ayer a que se enfriara el terreno para comenzar a retirar las cenizas y acondicionar el espacio.
Este no fue el único incendio durante la jornada de ayer en el municipio de Ourense. Los bomberos sofocaron otro fuego que se declaró en un piso de la rúa Ribeiriño.
Las llamas se declararon a primera hora de la tarde supuestamente en una lavadora, que quedó completamente calcinada. Las llamas provocaron una densa humareda y los efectivos evitaron que se propagarán por el inmueble.
