La recuperación de la normalidad la pasada primavera con la supresión de todas las restricciones implementadas para contener la propagación del covid y la entrada en vigor de la bonificación de 20 céntimos por litro tuvieron un claro efecto en el consumo de carburantes, según las últimas estadísticas de venta disponibles con datos cerrados a mayo.
En los cinco primeros meses del año, las gasolineras ourensanas despacharon cerca de 75.800 toneladas de carburante, cifra que es un 8,2% superior a la registrada en el mismo período de 2021. Sin embargo, las cifras de ventas de las estaciones de servicio reflejan que el consumo todavía no ha alcanzado niveles previos a la pandemia del covid, dado que entre enero y mayo de 2019, salieron de los surtidores ourensanos más de 80.100 toneladas.
Evolución
Mayo, el segundo mes con la bonificación activada de los 20 céntimos, se cerró con la venta en la provincia de 16.154 toneladas, un 5,3% menos que en abril, aunque este mes estuvo marcado por la celebración de la Semana Santa, lo que incrementó la movilidad por los desplazamientos vacacionales. El consumo de mayo es, con todo, superior al registrado en marzo, cuando las estaciones de la provincia habían vendido 14.214 toneladas de carburante, una prueba de que sí ha tenido impacto el descuento para el mercado del combustible.
