Los organizadores notan una recuperación de las ayudas públicas y piden un impulso mayor
Los concellos que más gastan suelen ser los que cuentan con fiestas más consolidadas y los que se ven en la obligación de colaborar para mantener la tradición o la exaltación de algún producto. Aunque hay algunas, como la Festa do Pulpo, que están organizadas por los propios concellos, la mayoría de estas fiestas tienen detrás a asociaciones o fundaciones, que destacan la capacidad de autofinanciación a la vez que defienden la necesidad de más ayudas.
Iván Prado, portavoz de Civitas Limicorum, asociación que organiza la Festa do Esquecemento de Xinzo de Limia, pide "un esforzo máis". Reivindica que "somos a segunda festa de Xinzo". En esta edición, recibieron "unha partida de última hora da Deputación que nos veu moi ben", puntualiza. Tiene ayuda del consistorio, y reciben "moi pouco" de la Xunta. "Virán preto de 20.000 persoas e máis de 500 traballan de xeito activo na preparación do evento", señala. Más de la mitad de los 22.000 euros de presupuesto se recaudan a través de merchandising o aportaciones de vecinos y comerciantes.
En la Festa do Boi de Allariz también hablan de capacidad de autofinanciación. El presupuesto de este año rondó los 73.000 euros, "dos cales o 60% corresponde coas achegas dos veciños e o resto, da venda de produtos de merchandising. Non temos patrocinadores", señala Antonio Blanco, portavoz de Xan de Arzúa, asociación organizadora. Destaca la ayuda municipal en limpieza u otros gastos pero, dice, "o Boi non depende da Administración". En cuanto al retorno, señala que "non o facemos polos cartos, senón pola tradición" y sugiere que "cambiando o enfoque, incluso podería dar máis cartos", aunque defiende el modelo actual.
En Ribadavia, desde la Fundación Festa da Istoria, Miguel García señala que tienen un apoyo "estabilizado". Notaron una bajada hace cuatro años pero en los últimos dos años "recuperáronse as cantidades". Reivindica la potencia de fiestas como la Istoria. "As administracións fan un bo traballo pero deberían implicarse máis". Para 2017 cuentan con 68.000 euros y estiman que el retorno puede llegar al "millón de euros".
En O Carballiño, el concejal de Turismo, Manuel Doval, remarca cómo la Festa do Pulpo empuja a la hostelería de la villa, con las reservas hoteleras al completo en los días previos de una fiesta que reunió este año a 125.000 personas. El presupuesto ronda los 120.000 euros, con una importante aportación de patrocinadores.
En Oímbra, destinan una parte de sus recursos a fiestas gastronómicas como la Festa do Pemento. "Este ano gastamos 15.000 euros, pero non buscamos o retorno económico, senón a promoción dos nosos produtos. De feito, cobramos 12 euros de ración polo que a nós nos custa 19", dice la alcaldesa, Ana Villarino. Este año contaron con 1.600 euros de la Diputación.
En Bande, destacan que "pouco a pouco" han ido consiguiendo patrocinios para la Festa do Peixe "El presupuesto es de 15.000 euros, aunque el retorno "é o triple".
