La pandemia metió una marcha más al Grupo Cuevas: “Nuestra actividad no ha parado de funcionar y eso nos ha tensionado muchísimo”, reconoció su director general, Artur Yuste, al presentar los resultados del 2020. Ahora “somos más fuertes, cada vez estamos más motivados”, sostuvo el primer directivo de la compañía. Los números ayudan porque batió todos los registros en empleo, facturación, beneficios e inversiones.
Las ventas se situaron en los 124,9 millones de euros, creciendo un 13,1% sobre el ejercicio anterior, los beneficios subieron hasta los 4,88 millones (un 27,2% más), las inversiones se situaron por encima de los cinco millones y el empleo llegó a los 700 trabajadores el 31 de diciembre del 2020, subiendo un 8,5%
El crecimiento, según la compañía, se sustentó en cinco palancas: la expansión en Castilla y León (facturaron 15,4 millones, un 121% más), los resultados de Frunatur (subió un 28,7% su volumen de negocio y procesó 5,5 millones de kilos), los supermercados (Cuevas Cash, por ejemplo, ya genera casi el 40% de las ventas totales del grupo), las franquicias de Spar (con nuevas aperturas en el rural) y el canal online, que se creó en octubre del 2020 y que lleva un crecimiento exponencial.
El sector de la alimentación ha sido declarado esencial durante la crisis del covid, de ahí su crecimiento, aunque el director general de Cuevas deslizó críticas al sistema sanitario porque a la hora de programar la vacunación, “no hemos sido tan esenciales”.
La crisis del covid retrató también otra forma de consumir. Las diferentes enseñas de Cuevas registraron crecimientos impensables en un ejercicio normal. Por ejemplo, se dispararon las ventas de productos de parafarmacia un 500% y un 70% los desinfectantes y lejías. Las secciones de charcutería tuvieron un aumento del 33%; la de frutería, un 26% y la de pescadería, un 20%.
Los datos de Cuevas certifican también otros comportamientos del consumidor durante el año de la pandemia, tales como que el alimento más solicitado fue el bacalao, cuya demanda creció un 69%, seguido de congelados, aperitivos y golosinas, con un 36%.
