Los grupos políticos del Concello de la ciudad se reunirán el lunes para comenzar a diseñar el 'codigo ético' que permita que 'non se suscite ningunha dúbida' sobre el uso de las asignaciones económicos que reciben de la institución municipal y que ascenderán durante este año a 174.000 euros.
El alcalde, Agustín Fernández, convocó ayer la junta de portavoces, prevista para las diez y media de la mañana, con este objetivo y el de determinar cuáles son los 'gastos impropios', después de la polémica suscitada por los efectuados por el grupo socialista, que incluían tiques de supermercado con ginebra y ron. Los portavoces también decidirán si el dinero destinado a esos gastos 'impropios' se reintegra al Concello o al grupo municipal, aunque el alcalde considera que debería ser a éste último.
Además de analizar cómo se incorporan los criterios de transparencia en las asignaciones a las bases de ejecución de presupuesto municipal, los portavoces también constituirán un grupo de trabajo sobre la ejecución de las mociones del Concello.
RESPONSABILIDADES
Al margen de este encuentro, el alcalde tiene también el 'encargo' realizado por el BNG en el pleno del jueves de depurar responsabilidades por los gastos del grupo con algún cese. En este sentido, el regidor explicó que 'ten que ser o grupo municipal, o de goberno e as altas instancias do partido os que fixen esas medidas e esixencias de responsabilidades'. Así, el PSOE celebrará el lunes una asamblea local para analizar estas cuestiones.
Por otro lado, la concejala Susana Bayo, que solicitó por escrito las cuentas del grupo municipal socialista que dieron origen a la polémica, aseguró que no se arrepiente de su actuación y que está 'satisfeita' por la petición de perdón expuesta por su grupo político. La también miembro de la ejecutiva gallega del PSOE no quiso entrar en la reclamación de responsabilidades por parte del BNG y dejó esa decisión en manos del partido y el gobierno municipal, reiterando también que su intención es continuar en el gobierno de la ciudad.
Por su parte, el secretario de organización del PSdeG, Pablo García, sostiene que 'independientemente de que todas las personas cometen errores' hay que, 'de alguna forma, asumirlos'.
Además de analizar cómo se incorporan los criterios de transparencia en las asignaciones a las bases de ejecución de presupuesto municipal, los portavoces también constituirán un grupo de trabajo sobre la ejecución de las mociones del Concello.
RESPONSABILIDADES
Al margen de este encuentro, el alcalde tiene también el 'encargo' realizado por el BNG en el pleno del jueves de depurar responsabilidades por los gastos del grupo con algún cese. En este sentido, el regidor explicó que 'ten que ser o grupo municipal, o de goberno e as altas instancias do partido os que fixen esas medidas e esixencias de responsabilidades'. Así, el PSOE celebrará el lunes una asamblea local para analizar estas cuestiones.
Por otro lado, la concejala Susana Bayo, que solicitó por escrito las cuentas del grupo municipal socialista que dieron origen a la polémica, aseguró que no se arrepiente de su actuación y que está 'satisfeita' por la petición de perdón expuesta por su grupo político. La también miembro de la ejecutiva gallega del PSOE no quiso entrar en la reclamación de responsabilidades por parte del BNG y dejó esa decisión en manos del partido y el gobierno municipal, reiterando también que su intención es continuar en el gobierno de la ciudad.
Por su parte, el secretario de organización del PSdeG, Pablo García, sostiene que 'independientemente de que todas las personas cometen errores' hay que, 'de alguna forma, asumirlos'.
