OBRAS

La incertidumbre reina en el inicio de la obra de Concordia

photo_camera El Concello inicia las obras de reforma y humanización de la céntrica calle de Concordia.
Comercio y vecinos se enteraron por fotos que pasaban de móvil en móvil de cómo será el proyecto

La rúa Concordia se reformará por fases, empezará en la parte inferior de la calle, en la zona más cercana a Progreso y durará  ocho meses, con el objetivo de poder tenerla lista para la próxima Navidad, algo que los comerciantes de la zona no ven muy claro. La incertidumbre era la tónica general entre los comerciantes consultados ayer, que conocían el proyecto por las fotos del boceto  que se expuso durante media hora y que se iban pasando de móvil en móvil. Lo demás, todo incógnitas. El jefe de obra, Martín Rejo, aclaró que se intentará minimizar el impacto, que habrá en todo momento un carril libre para el paso de vehículos y un espacio para peatones, así como pasarelas para acceder a los negocios y los portales, que no se verán directamente afectados salvo en “algún momento puntual” por necesidades de obra. 

La actuación, que asciende a 4,25 millones, consiste en una “humanización completa” con la reposición de servicios -se debe mejorar todo el saneamiento de la zona-, mobiliario urbano e iluminación. La gran novedad será la instalación de siete rampas mecánicas, que se harán en el lateral izquierdo de la calle en sentido subida, y que tendrá paradas cada pocos metros para que los viandantes puedan apearse, y que coincidirán con las entradas a los garajes. Estas rampas serán descubiertas, ya que según Rejo están preparadas para asumir las inclemencias meteorológicas y cambios bruscos de temperatura. La otra gran novedad es que la calle quedará en plataforma única, al mismo nivel la acera y la carretera. También se colocarán jardineras con especies autóctonas en la parte derecha.

La primera fase se acomete en el tramo inferior en el margen derecho. El tráfico no se cortará nunca, pero se modificará  el trazado y habrá afecciones. Habrá un único carril, se eliminan las zonas de carga y descarga de la parte inferior.

Por su parte, el alcalde de Ourense, Gonzalo Pérez Jácome, la calificó como la obra civil “más grande” que hizo nunca el Concello, y dijo que la ciudad “despega”. Según él,  la gente “va a andar más” con la instalación de estas rampas. 

 

COMERCIO RESIGNADO

Mientras, comercios y vecinos están sumidos en la incertidumbre. Una residente afeó a Jácome en la presentación que no les hubiese consultado nada, y en los negocios temen , sobre todo, que la duración acabe siendo más de la prevista. Miriam Bóveda, de Marco Valenti, afirmaba no tener ni idea, pero estaba preocupada por que “levanten la calle ahora, con la que está cayendo”. Mostraba sus dudas por la duración de  la obra y preguntaba “por dónde iba la rampa, a ver si me explicas, porque no tenemos ni idea”. Más arriba, Sandra Meréns, de Pasiños, también estaba resignada con las obras y con las pocas explicaciones, aunque confiaba en que “la calle se revitalice con la obra”, al igual que su compañera de Decoración Pétalos. Enfrente, en el estanco, la propietaria estaba indignada. “Esto quedará como Cardenal Quiroga”, aseguraba la dueña.

Te puede interesar