La crisis del coronavirus ha dado una nueva vuelta de tuerca y las empresas y sectores económicos buscan alternativas. Mayor consumo en productos de alimentación y de hogar, adecuación de la producción al nuevo escenario, supresión de viajes y reuniones o repatriar personal de otros lugares son solo alguna de las consecuencias ya visibles en la economía ourensana.
Las estanterías de algunos supermercados se vacían, la demanda se incrementa. En diferentes empresas del sector se insiste en la "tranquilidad" y en la "normalidad" a la hora de atender a los pedidos que, sin duda, ha aumentado. Fuentes del sector mayorista de la alimentación reconocían ayer "un repunte en la demanda" que se está atendiendo con normalidad y con constantes llamadas a la "prudencia" tanto en el consumo como en los pedidos.
En el grupo Coren, la principal industria agroalimentaria, la actividad "se desarrolla con normalidad", señalan fuentes del grupo. Eso sí, admiten que "el nivel de pedidos se mantiene en el nivel habitual con un ligero repunte en los últimos días ante el incremento de la demanda de los consumidores en los puntos de venta". Aún en ese caso, los pedidos "se están atendiendo con total normalidad y sin incidencias, de modo que el suministro de alimentos está completamente garantizado".
Coren está aplicando "todas las medidas indicadas por las autoridades sanitarias". Por otra parte, ha constituido un comité de seguimiento a nivel interno "para la aplicación de los protocolos correspondientes e informa de modo permanente a sus socios y trabajadores".
TEXTIL
La actividad de la industria textil también se ha adaptado a la nueva situación, sin que por el momento haya grandes incidencias. Sociedad Textil Lonia (STL)—la más importante del sector— mantenía ayer su actividad "habitual" en la fábrica de Pereiro de Aguiar, en la que trabajan unas 800 personas. Fuentes de la empresa que emplea a 2.500 personas en todo el mundo confirman la reducción de viajes y perciben menor consumo en zonas ya restringidas.
Adolfo Domínguez, con más de un millar de empleados, ha reducido al máximo las reuniones (ahora son por videoconferencia) y los viajes. Según un portavoz de la compañía, la empresa cuenta con un protocolo de actuación interno para solventar las posibles contingencias, "se ha extremado la comunicación con los empleados y se ha constituido una comisión de seguimiento". Adolfo Domínguez ha reorganizado también los comedores y las zonas de descanso para evitar la presencia de muchas personas "y también se está intentando aplicar métodos de teletrabajo para grupos de riesgo", aunque está en fase de estudio.
INDUSTRIA
La actividad en los polígonos industriales se mantiene aparentemente sin altibajos, "aunque la situación puede cambiar en cualquier momento", como admiten en el sector. La asociación empresarial de San Cibrao presta ayuda e información a las empresas a la hora de aplicar los protocolos dictados por las autoridades sanitarias y, en apariencia, no detectan alteraciones importantes en el ritmo de trabajo empresarial.
Fuentes de la industria de la automoción indicaron ayer que la producción se está manteniendo, si bien están a la espera de decisiones "estratégicas" que pueda tomar la gran industria a la hora de reordenar los pedidos.
Otras empresas del sector industrial están haciendo "un seguimiento constante" a la actualidad, aunque reconocen que los efectos de la crisis tendrán consecuencias en las previsiones de actividad "durante meses".
El turismo, atento a las bajas, y el sector tecnológico se apunta al teletrabajo
El sector servicios, sobre todo turismo, hostelería y comercio, también siguen con atención esta crisis. Caldaria, que gestiona los balnearios de Arnoia, Lobios y Laias, mantiene su nivel de actividad. El programa de estancia de remeros de otros países se mantiene y también el programa de termalismo social, pese a la confusión inicial. De hecho la Asociación Nacional de Balnearios (Anbal) recordó que el Programa de Termalismo Social del Imserso "sigue funcionando con total normalidad y que la medida adoptada por el Gobierno recoge la suspensión del programa de Turismo Social". Por ello, señala que los usuarios que tengan reserva podrán acudir con normalidad a los balnearios y ha querido aclarar la "confusión" ya que "sigue en funcionamiento con total normalidad".
Anbal ha recordado que su programa incluye una consulta médica a la llegada del usuario al establecimiento en la que se realiza una valoración general de la salud del usuario.
TECNOLOGÍA
Por otra parte, empresas tecnológicas como Redegal (agencia de márketing digital y comercio electrónico) ha establecido ya el teletrabajo en sus oficinas de Madrid, A Coruña y Ourense "como medida preventiva ante la evolución del coronavirus". Aclara una nota de la compañía que "aunque no se han dado casos positivos entre la plantilla de trabajadores" ha decidido implantar el método del trabajo a distancia. Redegal también ha pospuesto los viajes de empresa y las visitas a clientes o proveedores. Jorge Vázquez, presidente de la empresa alude a que las medidas se han tomado "por responsabilidad" para evitar la propagación del virus.
