OURENSE

Insulta e impide entrar en casa a su esposa por la colocación de un comensal

La jueza de Celanova dejó en libertad con cargos pero con una orden de alejamiento a Alfonso P.A., un vecino de Gomesende detenido por la Guardia Civil por maltratar y amenazar a su esposa

La jueza de Celanova dejó en libertad con cargos pero con una orden de alejamiento a Alfonso P.A., un vecino de Gomesende detenido por la Guardia Civil por maltratar y amenazar a su esposa, a la que impidió entrar en el domicilio familiar tras una discusión, según la versión de la víctima.

Esta última, según relató a los agentes, había sufrido insultos y amenazas durante una comida entre amigos tras la matanza del cerdo. La disputa comenzó cuando, según aseguró la mujer, su marido se enfadó con ella por la colocación de un comensal, algo más apartado del resto de parejas para que estuvieran más cómodos. Asegura la supuesta víctima del maltrato que le llamó "puta brasileña" o que la iba llevar a Ourense para prostituirla.

Una vez que los amigos del matrimonio se fueron, la esposa salió también fuera para no quedarse a solas con él y esperar a que se calmara. No obstante, cuando quiso regresar se encontró con la puerta cerrada y su marido no atendió a las llamadas de teléfono. La mujer optó por llamar a la Guardia Civil porque tenía frío y estaba sola en el exterior de la casa.

La mujer relató que su esposo no sólo la insulta desde que están en España (se casaron en Estados Unidos) sino que también la agredió. En una ocasión, según su testimonio, le dio una bofetada delante de un amigo y en otra, sin testigos, la arrojó contra un cactus y le propinó una patada.

Por su parte, Alfonso P.A. negó que la hubiera insultado. Sí reconoció que tuvieron un problema con la colocación de un comensal porque, según él, su esposa lo quería dejar fuera de la mesa. El inculpado asegura que su esposa comenzó a levantar la voz y se fue de casa sobre las once de la noche. En cuanto a por qué no abrió la puerta, dice que no escuchó nada.

El esposo sostiene que su esposa lo denuncia para cobrar la mitad de la pensión que recibe de EEUU en virtud de un acuerdo prematrimonial en caso de maltratar a su cónyuge.

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