La rueda de prensa de presentación de ”As puntas da louza”, la obra ganadora del 36º Premio de Poesía Cidade de Ourense se convirtió ayer en un nuevo episodio del choque entre el sector cultural y el alcalde, Gonzalo Pérez Jácome. Tras hablar del poemario, la ganadora del premio, Lorena Conde, pidió a Jácome que reabriera el Auditorio municipal. El espacio cerró sus puertas por decisión unilateral del alcalde hace casi medio año, con la excusa de la pandemia. Hoy es el único auditorio de las ciudades gallegas que sigue cerrado.
Ante la interpelación, Jácome echó la culpa al gobierno autonómico. Dijo que su intención es reabrir “cuando no sea necesario guardar dos butacas de separación entre personas”, una medida de la Xunta que -añadió- produce un aforo “insuficiente”, y marcó en unas 500 personas el límite para abrir.
Jácome insistió en que su gobierno “cree en los espectáculos más que sus predecesores”, y repitió que, una vez reabra el Auditorio, tendrá una programación distinta, con -a su juicio- más respuesta popular. “Si los espectáculos gustan tienen público”, aseguró, y lamentó que sufre “una campaña de desprestigio”. Pocas horas después, Jácome tildaba a “los culturetas de extrema izquierda” de “racistas” y “supremacistas culturales” en un tuit.