Decía el año pasado que la ICC Week estaba en vías de convertirse en un referente en su ámbito a nivel nacional. ¿Este año es el de confirmación?
El año que viene va a ser la décima edición y, si repasamos todos los personajes que han pasado durante estos años, se puede decir que somos un ejemplo y un referente nacional por haberse contextualizado dentro de las industrias culturales y creativas y por haber traido referentes de estos sectores. ¿Que me gustaría que fuese más famosa? Por supuesto, pero en España hay un montón de festivales y todos competimos por la atención. Nos queda camino por andar pero vamos bien orientados.
Mencionaba ahora que la próxima será la décima edición. ¿Cómo evalúa la evolución desde el primer año hasta el día de hoy?
Una cosa en la que uno empieza a notar que el festival ha crecido es que, a la hora de afrontar una nueva edición, la forma de defender el evento de cara a presentárselo a nuevos ponentes. Cada vez tienes más gente importante que ha pasado por aquí y, de alguna manera, gozas de más credibilidad que al principio. Sin embargo, hay otras, como la fundamentación y el enfoque de la primera edición, que no han variado ni una coma desde el inicio. Esta visión la fijó la Diputación cuando se presentó y se ha mantenido firme todos estos años.
¿Por qué siguen apostando por Ourense?
Lo principal es porque la Diputación se ha responsabilizado por completo de la organización. El programa ya forma parte de sus políticas culturales.
¿Qué ha sacado Ourense de la ICC Week y qué ha sacado la ICC Week de Ourense?
Una de las misiones de esta iniciativa es trasladar a la sociedad todos los campos de las industrias culturales. Hablamos de moda, música, cine, publicidad, arquitectura, literatura… y mostrar los ejemplos a nivel nacional de referentes en estos sectores, estimulando a la gente a ser creativa y mostrándoles que se puede vivir de ellas. Y, por otra parte, también está la convergencia entre industrias. Por ejemplo, ¿cómo utilizar la publicidad? Pues hemos tenido a Toni Segarra, el gran gurú de la publicidad en España, que puede inspirar campañas sobre el pino ourensano, por decir algo. O escuchar una masterclass de Óscar Mariné, referente del diseño gráfico, puede inspirar a diseñadores ouresanos y adaptarlo a sus necesidades en la provincia.
El cielo de Trevinca es la imagen del cartel de la ICC Week este año. La imagen del año pasado, el Alpinche de Estanislao Reverter, fue muy importante. ¿Tendrá un papel tan protagonista?
El cielo de Trevinca se ha expuesto en el foro más importante de gestión cultural, Publika, en Madrid, que fue donde se desveló la imagen del cartel. Lo que hacemos cada año es introducir un nuevo elemento de la provincia para promocionarlo. Al igual que cuando escogimos la Ribeira Sacra, exponemos algo natural, y este año tratamos de vender el observatorio. Además, tendremos una charla muy interesante sobre ciencia, impartida por José Manuel Nieves, colaborador habitual de Cuarto Milenio. Además, tendremos otra sobre música en la que conectamos las estrellas musicales con las celestes.
La música es un elemento muy importante en este evento. ¿Cuáles son los platos fuertes de este año?
Para nosotros siempre tiene un papel muy importante. Una de las grandes charlas será sobre inteligencia artificial y sus aplicaciones en la sociedad actual. En ella participará la gurú Gemma Galdón, además de otros expertos como Manel Sanromá, José María Lassalle y Alba Meijide. Creo que es “top” nacional en su ámbito. También vendrá un gran referente de las industrias culturales emergentes. Yo le definiría como el Ibai Llanos gallego, es más, ourensano. Estoy hablando de Xurxo Carreño.
El Foro La Región vuelve a repetir en la programación. ¿Cómo de importante el foro?
Es muy importante. Este año ha invitado a la gente de Rock FM, todo un referente, que trabaja de un determinado nicho y que ha conseguido algo muy difícil, que es tener cerca de un millón de oyentes. Eso se logra gracias a unos profesionales que han sabido conectar con los amantes del rock. Allí contarán su experiencia, como nació y toda su trayectoria…
E igual inspiran a alguien para crear algo como Rock FM desde Ourense.
Pues por qué no. Igual hay un oyente que toma nota y se le ocurre intentarlo desde Ourense.
Los eSports ganan cada vez más peso en la ICC Week. ¿Qué novedades hay en este ámbito?
Hace muchos años que apostamos por los deportes electrónicos. Creo que Ourense y la ICC Week son los primeros que han dado un paso adelante en este ámbito y los que más hemos apostado por el propio término ESports. Volverá a contar con grandes referentes.
¿Cree que este es un evento enfocado a un público concreto o es algo intergeneracional?
El eslogan es: “El punto de encuentro de la comunidad creativa”. La comunidad creativa no tiene género, edad ni nada parecido. La comunidad creativa va desde José María Guzmán, que llega en su momento de madurez, hasta gente más emergente y más joven como Vera Fauna. Lo importante no es ser experto, es tener inquietudes culturales.
¿La cultura y en particular la ICC Week pueden ser un revulsivo para atraer talento?
Definitivamente sí. Lo que tenemos que analizar entre todos son los elementos diferenciadores tiene la provincia para, a través de políticas culturales y actividades, tratar de conectar con el resto de comunidades. Es posible atraer talento y turismo a través de la cultura. Una buena planificación y estrategia de los recursos pueden hacer de la cultura un motor de desarrollo económico.
Aún estamos a las puertas de la novena edición, pero, ¿ya hay algo pensado para el décimo aniversario?
Este es un trabajo en el que tienes la antena funcionando todo el año. Esta antena va captando cosas y posibilidades a diario. Siempre quedan ponentes de un año para otro. Puede que ya haya cosas para el año que viene.
¿Qué afluencia espera?
Creo que las cifras no deben ser el objetivo principal. Un foro de cultura como este tiene más que ver con lo cualitativo más que con lo cuantitativo. No significa que cuanta más gente haya mejor. De lo que se trata es que la gente se quede con el mensaje y que inspire a cinco o diez personas que, a través de las charlas, hayan podido progresar en sus campos. Es más importante que alguien tenga un encuentro con su referente que poner unas cifras.
