El Supremo dice que el TSXG debería haber anulado el fallo, en el que se apreció una prueba ilegal

El juicio por el 'crimen de la estricnina' deberá repetirse

José Luis Lamelas Álvarez junto a su abogado, Emilio Atrio. (Foto: MARTIÑO PINAL)
La Audiencia de Ourense deberá repetir el juicio seguido contra José Luis Lamelas Álvarez (60 años), condenado a 17 años de cárcel por asesinar con veneno (estricnina) a un convecino de Castro de Escuadro, en Maceda, el 22 de noviembre de 2009. El Tribunal Supremo ha estimado el recurso de casación presentado por el letrado de la defensa, Emilio Atrio, dejando sin efecto la sentencia del Tribunal Superior de Xustiza de Galicia y que resolvía a su vez la apelación del fallo dictado en primera instancia por la Audiencia de Ourense.
Un jurado popular había considerado culpable a Lamelas Álvarez teniendo presente el 'profundo resentimiento' que el acusado sentía hacia su vecino. No creyó la versión dada por Lamelas, de que olvidó a la entrada de la finca de la víctima una bolsa que contenía alimentos y una botella de vino en la que, según él mismo reconoció, había echado una cucharadita de estricnina pero matar jabalíes.

El Alto Tribunal entiende que a la hora de resolver el recurso de apelación el TSXG debería haber ordenado repetir el juicio ya que, tal como observó ese mismo órgano, el jurado tuvo muy en cuenta en su veredicto una declaración autoinculpatoria del imputado ante un guardia civil que investigaba los hechos, pero sin garantías legales. E l agente declaró en el juicio de la Audiencia que el acusado le confesó que quería envenenar a su vecino y que de lo único que se arrepentía era de no haberlo hecho antes. Ahora bien, la confesión se hizo sin presencia de un letrado, con lo cual, tal como reconocía el propio TSXG, debía desestimarse.

Pero, tal como dice el Supremo, 'es preciso, dada la importancia que su realización ha tenido, que su práctica no contamine la prueba practicada'.De ahí que en el nuevo juicio no podrá presentarse esta declaración.

Te puede interesar