Esta agresión se produjo en una residencia para discapacitados psíquicos de Ourense. El acusado posee un coeficiente intelectual de 35 y una minusvalía del 68 por ciento
Un apuñalamiento en la residencia de discapacitados psíquicos Santa Catalina, emplazada en la localidad de Cornoces (Amoeiro), sentará en el banquillo a uno de los residentes, Manuel D.G., de 66 años. Ocurrió en la habitación número 18 a las 00,45 horas del 10 de febrero de 2021 cuando los usuarios estaban ya en sus cuartos. La agresión que sufrió M.D.L. por parte de su compañero casi le cuesta la vida. El inculpado utilizó un cuchillo de cocina que tenía guardado para menoscabar la integridad física de su compañero. Sufrió un shock hemorrágico tras una herida incisa a nivel cervical con sección de la vena yugular anterior izquierda y la sección de la vena tiroidea inferior. Durante tres días se temió por su vida, pero finalmente el paciente pudo recuperarse. Tardó 44 días.
El inculpado, según recoge el fiscal en su escrito de acusación, presenta un retraso mental moderado, con un coeficiente intelectual de 35 y una minusvalía del 68 por ciento. Según determinaron los forenses, su capacidad intelectiva y volitiva las tenían profundamente afectadas cuando ocurrieron los hechos. Por esta razón, la fiscal pide la absolución por una eximente completa de trastorno mental. Los médicos admitieron que el agresor presenta “alteraciones de conductas graves” que le pueden provocar “acciones desproporcionadas a un estímulo mínimo mediado por la impulsividad”.
Cuantiosas indemnizaciones
No obstante, la acusación pública pide como alternativa, por el delito de lesiones graves, el ingreso en un centro adecuado a la patología que padece durante cinco años, así como la prohibición de que se acerque a la víctima a menos de 300 metros y la comunicación durante seis años.
No lo exime de la indemnización. La acusación pública pide 9.525 euros para el perjudicado, por las lesiones y secuelas, y que abone al Sergas 1.560 euros por los gastos ocasionados.
