Ourense despidió al reconocido e inquieto jurista, una referencia en el derecho matrimonial, que presidió el Liceo, la Coral De Ruada, la Filarmónica y fue teniente de alcalde
Los ourensanos llenaron ayer la iglesia parroquial de Santa Eufemia del Centro para acompañar a la familia del reconocido jurista amando Prada Castrillo, fallecido el pasado jueves a los 84 años de edad, durante la celebración de su funeral.
Prada Castrillo fue una figura muy importante, tanto para la vida social ourensana como para el ámbito de la judicatura. Perteneció al Consejo de administración de La Región, donde también ejerció como asesor jurídico. Fue el primer delegado de Cultura de la democracia, nombrado por Pío Cabanillas, cargo al que llegó en 1977 y para lo cual tuvo que abandonar la presidencia del Liceo, a la que accedió en enero de 1976.
Prada Castrillo estuvo durante toda su vida vinculado a esta entidad social, de la que era socio de honor, y fue uno de los responsables de la redacción de los estatutos que permitieron, a principios de los 80, que las mujeres fueran socias titulares, y no por ser esposas o hijas.
Este reconocido ourensano estuvo acudiendo hasta prácticamente el final de sus días, puntualmente a las 14,15 horas, al Liceo para leer la prensa. También presidió la Coral de Ruada, la Filarmónica y fue primer teniente de alcalde y alcalde en funciones de la ciudad. Pero además, por el despacho profesional de amando Prada Castrillo pasaron casi la totalidad de las separaciones matrimoniales de la provincia, al estar especializado fundamentalmente en derecho canónico y mostrar una especial sensibilidad por estos asuntos. El decano honorífico del Colegio de abogados, Miguel Ángel González Trigás, calificaba ayer a amando Prada como "una referencia, sobre todo en el derecho matrimonial", y recordó que "fue quien me introdujo hace más de 30 años en la jurisdicción eclesiástica. Tenía una gran personalidad".
