Tras más de medio año sin reunión alguna para diseñar el plan de acciones para atajar la crisis del sector textil, la mesa que integran Xunta, patronal y sindicatos volvió a reunirse la semana pasada, pero sin avance alguno. Las discrepancias se registran entre la Consellería de Traballo y los sindicatos, que no llegan a acuerdo sobre las medidas laborales, mientras en los talleres ourensanos observan el enfrentamiento con creciente preocupación por el futuro del sector. De hecho, ya hay otro taller en fase de cierre.
La falta de consenso sobre las medidas que se aplicarán a los trabajadores ante la crisis de los talleres textiles mantiene paralizada la mesa en la que se negocia el futuro del sector, y en la que participa la Xunta (a través de las consellerías de Industria y Traballo), UGT, CC.OO y las organizaciones empresariales. En concreto, el desacuerdo se registra entre las organizaciones sindicales y Traballo.
El presidente de la Asociación de Talleres Textiles de Ourense, Vitaliano Falivena, explicó que el sector llevaba esperando más de medio año a que se convocase la mesa, que finalmente se reunió la semana pasada en Santiago, pero no se registró avance alguno. Según indicó, ya existe acuerdo básico sobre las medidas que necesita el sector para afrontar esta crisis, pero está pendiente de que Traballo y los sindicatos concreten las condiciones de trabajo, particularmente durante los paros técnicos que sufren estas empresas entre el final de una campaña y el inicio de la siguiente. Antes de la crisis, estos paros duraban dos semanas, pero en los últimos años se prolongan entre seis y ocho. Las empresas demandan que la Administración afronte los gastos que esto ocasiona proporcionando cursos de formación para los empleados, pero los sindicatos no están de acuerdo sobre las condiciones.
Las otras medidas que estudia la mesa del textil contemplan la puesta en marcha de una línea de ayudas para modernización y renovación tecnológica en los talleres, la creación de una marca Made in Galicia o que la concesión de subvenciones a las grandes compañías textiles esté condicionada a la contratación de parte de su trabajo a talleres locales, en lugar de recurrir a otros del extranjero (con mano de obra más barata).
La reunión de la semana pasada se suspendió sin que se fijase una nueva convocatoria, con lo que se complica la pervivencia de muchas empresas del sector.
El presidente de la Asociación de Talleres Textiles de Ourense, Vitaliano Falivena, explicó que el sector llevaba esperando más de medio año a que se convocase la mesa, que finalmente se reunió la semana pasada en Santiago, pero no se registró avance alguno. Según indicó, ya existe acuerdo básico sobre las medidas que necesita el sector para afrontar esta crisis, pero está pendiente de que Traballo y los sindicatos concreten las condiciones de trabajo, particularmente durante los paros técnicos que sufren estas empresas entre el final de una campaña y el inicio de la siguiente. Antes de la crisis, estos paros duraban dos semanas, pero en los últimos años se prolongan entre seis y ocho. Las empresas demandan que la Administración afronte los gastos que esto ocasiona proporcionando cursos de formación para los empleados, pero los sindicatos no están de acuerdo sobre las condiciones.
Las otras medidas que estudia la mesa del textil contemplan la puesta en marcha de una línea de ayudas para modernización y renovación tecnológica en los talleres, la creación de una marca Made in Galicia o que la concesión de subvenciones a las grandes compañías textiles esté condicionada a la contratación de parte de su trabajo a talleres locales, en lugar de recurrir a otros del extranjero (con mano de obra más barata).
La reunión de la semana pasada se suspendió sin que se fijase una nueva convocatoria, con lo que se complica la pervivencia de muchas empresas del sector.
