Protección Civil activó la alerta naranja para hoy por mínimas extremas en Ourense y Lugo

Las nevadas dieron paso a temperaturas de hasta 12 grados bajo cero e intensas heladas

Los termómetros de la ciudad marcaban temperaturas bajo cero en la mañana de ayer. (Foto: José Paz)
Los vecinos de Xinzo y Baltar tuvieron que soportar las temperaturas más bajas de la provincia con termómetros que reflejaban hasta 12 grados bajo. La intensa nevada ha dejado paso a un frío intenso y placas de hielo que invitan a no salir de casa. En el Concello de Lobios, los vecinos de hasta seis pueblos permanecen aislados.
Las precipitaciones en forma de nieve y el comienzo de la retirada de la masa polar continental que afectó a toda la península dieron paso a una mayor estabilidad atmosférica y hasta el sol asomó en gran parte de la provincia. Pero hubo mucho hielo y temperaturas tan bajas que hicieron tiritar a los mismísimos termómetros. Sobre todo en los concellos situados más al sur. Hasta el punto en que los registros bajaron hasta los 12 grados bajo cero en Xinzo o a los -11 en Baltar.

‘Levo tres días sen auga na casa porque co frío reventoume a cañería. E os que me quedan, porque ata que non se vaia a neve non poden vir arreglala’, relataba Maximina Campo, vecina de Baltar, donde la rotura de tuberías, contadores helados, hortalizas quemadas así como fuentes, estanques e incluso comederos de animales convertidos en cubitos de hielo fueron estampas que se repitieron a lo largo de toda la jornada. ‘O día só vale para estar na casa por riba da cheminea’, bromeaba Juan Álvarez, otro vecino de Baltar.

Con nieve sólo en zonas altas, ayer el peligro estaba en las placas de hielo que se formaron en caminos y calzadas.

En Lobios, Protección Civil tuvo que rescatar a una vecina de Bouzas que resbaló y se fracturó un brazo. ‘Los pueblos de Bouzas, Guende, Briñidelo, Gustomeao, Saa y Cimadevila están aislados y sólo se puede acceder a ellos con todoterrenos o tractores’, advertía el jefe del servicio de Protección Civil de Lobios, José Benito Salgado, quien pedía precaución a los conductores. ‘Si hiela, la situación se presenta complicada con placas de hielo por todos lados’.

En Verín, hacía 10 años que los vecinos no veían tanta sal junta después de que todas las calles del ayuntamiento fueran regadas con este producto.

En la ciudad de Ourense, los bomberos tuvieron que echar sal en la calle Castelao en un día en que las temperaturas mínimas bajaron hasta los 2 grados bajo cero y la máxima sólo alcanzó los 7.

Mientras, la situación se fue normalizando en villas como Celanova, donde la zona más peligrosa era la carretera de Quintela de Leirado, así como en Allariz. ‘Non temos ningún pobo illado e os maiores problemas concéntranse na zona de Torneiros’, resumía ayer el concejal alaricano Bernardo Varela.

Los registros fueron los más bajos de la temporada invernal (todas las estaciones tuvieron mínimas negativas), batiendo un récord por segundo día consecutivo. Si bien Baltar está a 824 metros de altitud, los meteoró logos explican las bajas temperaturas de Xinzo (a 622 metros) en un fenómeno de inversión térmica. ‘El aire frío pesa más que el cálido, baja a los valles, se estanca y se enfría mucho’, aseguran fuentes de Meteogalicia.

Las temperaturas gélidas del sábado continuarán en el día de hoy con alerta naranja (riesgo moderado para la población) declarada en las provincias de Ourense y Lugo por previsión de mínimas extremas que podrían llegar nuevamente a los 10 grados bajo cero.


Pueblos aislados en el Norte portugués


Varias autopistas y carreteras del norte de Portugal permanecían ayer cerradas al tráfico, algunas con decenas de vehículos atrapados por la nieve, que dejó también aisladas algunas poblaciones de la zona, según fuentes oficiales. El inusual temporal de frío que azota la península ibérica ha hecho descender por debajo de los cero grados el clima templado de Portugal, donde las autoridades admitieron la imposibilidad de restablecer el tráfico en algunas carreteras mientras no mejoren las condiciones meteorológicas.

Varias de las carreteras nacionales y comarcales que unen Portugal con Galicia y Castilla y León tienen puntos cortados o zonas de tráfico restringido incluso con el uso de cadenas.

Una de las autopistas principales del país, la A4 está cerrada al tránsito desde la tarde del viernes en la zona septentrional de Amarante. Ocho de los 18 distritos, en el norte y las regiones interiores, tenían ayer carreteras cerradas o con problemas de tráfico por la nieve.

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