Novas Xeracións del PP estuvo el jueves con los comerciantes de la calle Bedoya dado el evidente perjuicio que han causado a vecinos y comerciantes los injustificables retrasos de las obras de Bedoya, ya de por sí en entredicho desde sus inicios.
Los jóvenes populares señalan que el daño económico provocado a los comerciantes de la calle durante el desarrollo de las obras debe ser resarcido y, del mismo modo, debe haber algún responsable, ora por los retrasos injustificados, ora por los falsos plazos señalados. Así, se refieren a que en un primer momento se aseguró que las obras estarían finalizadas antes de Navidad, después en enero y, finalmente, en marzo, algo que no ha ocurrido.
La agrupación pide al grupo de gobierno que pongan todo su empeño no sólo en arrimarse unos a otros en las fotos sino que se marquen como punto de partida en su labor de gestión la exigencia de que las obras municipales cumplan estrictamente con la legalidad tanto en su tramitación como en su desarrollo.
Daños a negocios Novas Xeracións considera que es necesario que se ejecuten los plazos y con las calidades exigibles porque sólo así huiremos de daños evitables que en algunos casos condenan a los pequeños negocios a un esfuerzo inasumible y un desenlace ciertamente oscuro.
En su relato de los perjuicios que causan las obras a los comerciantes, la organización señala que alguno de ellos se vio obligado a cerrar su negocio ante la amenaza de un corte de agua que posteriormente ni siquiera se llegó a producir.
La agrupación pide al grupo de gobierno que pongan todo su empeño no sólo en arrimarse unos a otros en las fotos sino que se marquen como punto de partida en su labor de gestión la exigencia de que las obras municipales cumplan estrictamente con la legalidad tanto en su tramitación como en su desarrollo.
Daños a negocios Novas Xeracións considera que es necesario que se ejecuten los plazos y con las calidades exigibles porque sólo así huiremos de daños evitables que en algunos casos condenan a los pequeños negocios a un esfuerzo inasumible y un desenlace ciertamente oscuro.
En su relato de los perjuicios que causan las obras a los comerciantes, la organización señala que alguno de ellos se vio obligado a cerrar su negocio ante la amenaza de un corte de agua que posteriormente ni siquiera se llegó a producir.
