La apertura en domingo se notó más en los centros comerciales y menos en los centros locales
El primer domingo del tradicional tiempo de rebajas -el calendario clásico marca su inicio el 1 de julio, aunque algunas grandes cadenas del sector textil las adelantaron casi 15 días- cambió el paisaje, sobre todo del centro comercial aberto Ponte Vella -donde se vio un mayor movimiento-, pero también de otras zonas del centro de la ciudad, aunque en bastante menor grado.
Y es que, a pesar de que los representantes de las asociaciones de comerciantes han criticado la liberalización de fechas para aplicar las rebajas, porque desvirtúan el objetivo marcado para esos descuentos, se muestran "moderadamente optimistas" con respecto a las perspectivas de ventas que se presentan en esta temporada estival.
Como explica el presidente de la Federación de Comercio de Ourense, Aurelio Gómez Villar, se espera que "hasta mediados de julio, estas rebajas sean buenas para el comercio de la ciudad, porque en realidad el verano todavía no ha llegado y los establecimientos cuentan con mucho género que ofrecer", y esto los clientes lo saben y querrán aprovechar los descuentos, en algunos casos ciertamente agresivos y que llegan al 70 % en determinados productos.
En todo caso, Gómez Villar se muestra cauto cuando se le pregunta si estas rebajas serán mejores que las del año pasado. "El Instituto Nacional de Estadística reflejaba que el pasado mes de mayo cayó un 1,1 % el consumo en Galicia", recuerda el presidente de la Federación de Comercio, y es la razón por la que no suscribe el optimismo de la Confederación española de Comerciantes, que apunta a un aumento de un 3,3 % de las ventas en este periodo de rebajas. "Ojalá sea así, pero, de momento, mostramos sólo un moderado optimismo", certifica el representante provincial del sector comercial.
