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Ourense es la provincia con mayor número de investigados por provocar incendios

Los detenidos e investigados por su implicación en incendios en lo que va de año alcanza cifras similares al total del 2018 en Galicia

Un centenar de personas han sido investigadas o detenidas en Galicia en lo que va de año en relación con incendios forestales, dato que ha servido al conselleiro de Medio Rural, José González, para reivindicar el "esfuerzo" en el despliegue de medios humanos y tecnológicos para "disuadir" a los "incendiarios", puesto que ya casi alcanza la cifra global de 2018, cuando fueron 105 los imputados o arrestados por estos hechos.

González ha destacado que la coordinación "está funcionando", si bien ha reconocido que "la meteorología está ayudando" en la comunidad gallega, tras unos meses de julio y agosto caracterizados por un tiempo cambiante y sin temperaturas extremas ni vientos del nordés.

Ante la previsión de que las condiciones cambien a partir de ahora, el conselleiro ha asumido que cuando esto ocurre "hay un efecto llamada", de ahí el mensaje a la ciudadanía para que sepa que están dispuestos "todos los medios para la disuasión", desde Policía Autonómica y Nacional, Ejército, cámaras de videovigilancia y hasta drones.

Por su parte, la Delegación del Gobierno ha emitido un comunicado en el que desgrana por provincias y meses las detenciones e investigaciones que corrieron a cargo de Guardia Civil y Policía Nacional.

En este listado destacan Ourense con 19 y Lugo con 13 personas, así como los meses de mayo y marzo, con 12 y 11, respectivamente. A Pontevedra correspondieron siete investigados y a A Coruña, uno, mientras que en agosto van cuatro.

El titular de Medio Rural, en su intervención, ha resaltado el aumento de en torno al 40% de los detenidos e investigados por parte de la policía adscrita a la comunidad autonómica, y ha señalado también el trabajo en coordinación con las brigadas de investigación del servicio de lucha contra incendio de la Xunta.

Después de un 2017 que fue "momento de inflexión", por la ola de fuegos de octubre, el Gobierno gallego entiende "que el periodo de máximo riesgo se incrementa" y de ahí que las cuadrillas con contrato temporal estén operativas cinco meses, en lugar de tres, puesto que "hay que trabajar más en extinción y en prevención"

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