Ourense pierde pulso en la lucha por la condición de tercera ciudad gallega

A 300 días de que tengan lugar las sesiones para que tomen posesión los concejales del mandato 2023-2027 y la toma de posesión de los alcaldes, La Región analiza una serie de indicadores socioeconómicos para poner en la balanza la situación de las siete ciudades gallegas, locomotoras de la Comunidad, y en general, Ourense tiene ante sí un panorama algo más oscuro, especialmente comparado con aquellas urbes que tratan de disputarle la condición de tercera ciudad de Galicia que, por población, es desde hace décadas. La evolución demográfica es, con todo, uno de los principales quebraderos de cabeza para la ciudad de As Burgas, que en la evolución a cuatro años vista desde 2017 es, junto a Ferrol, el único de los siete grandes concellos que retrocede en población, un descenso del 0,98% que la deja ya con un padrón por debajo de los 105.000 habitantes, mientras que sus directos competidores, Lugo y Santiago, llevan años con una tendencia totalmente opuesta. En esta coyuntura, el envejecimiento de la población, más agudo en la provincia pero que también se nota en la ciudad, deja a Ourense como la segunda urbe de la Comunidad en el ranking de edad media, con 44,9 años, solo por detrás de Ferrol. Como dato positivo en términos demográficos, el porcentaje de vecinos con menos de 20 años, ya que representa casi el 17% del total del censo, el cuarto mejor dato entre las ciudades gallegas. En Pontevedra, un ejemplo de modelo urbano, el porcentaje asciende al 18,5%. Situación económica Los últimos datos municipales en términos de afiliación a la Seguridad Social tampoco dejan el mejor gusto posible para los intereses de Ourense, ya que pese a conseguir crecer el número de cotizantes un 1,2% entre el verano del año pasado y el actual, este incremento es el más bajo (empatado con Lugo) de los grandes concellos de la Comunidad, muy por detrás del 2,7% de alza de Santiago o el 2% de Ferrol. Las condiciones laborales tampoco son las mejores, ya que según los últimos datos del Instituto Galego de Estatística, Ourense tiene el segundo salario por hora más bajo de las siete urbes, con 8,4 euros, mientras que a la cabeza está A Coruña y Santiago, por encima de los 10 euros. Solo Lugo, con 8,1 euros, está por debajo. El poder adquisitivo de los pensionistas, por otro lado, es el más bajo de las siete localidades. Los 1.018 euros de pensión media en la ciudad de As Burgas contrastan con los 1.252 de Ferrol o los 1.202 de A Coruña. El resto de municipios, salvo Lugo, están por encima de los 1.100 euros. Brotes verdes Algo mejores son las sensaciones en el dinamismo empresarial, ya que los datos cerrados al primer semestre del actual ejercicio reflejan que Ourense ocupa la cuarta posición en número de empresas creadas con un total de 110, prácticamente a la par que Santiago y, lógicamente, lejos de las 300 de Vigo y las 298 de A Coruña. La ciudad de As Burgas creó 20 empresas más que Lugo, con Pontevedra en 69 y Ferrol en 38. Mientras, el cuarto escalón es también el que ocupa Ourense en precio medio delalquiler, lo que significa que pese a las continuas subidas, es una de las urbes má asequibles.