Desde Ourense hasta Turquía para ayudar tras el terremoto

El ourensano Adrián Álvarez, técnico de radiodiagnóstico, recuerda el segundo gran terremoto de Turquía como una vibración “muy grande”, pero corta. El pasado 20 de febrero, en el Hospital de Campaña español en Turquía, hablaba con sus compañeros de Traumatología cuando el suelo empezó a sacudirse con fuerza. “Solo pensé en ponerme a salvo y en ayudar a los compañeros y pacientes”, explica. Álvarez llegó a Turquía la noche del 10 de febrero, en el marco del primer relevo del Equipo Médico de Emergencia español (Start, por sus siglas en inglés) de Cooperación Española. Los 82 profesionales que viajaron a Iskenderun (Turquía) tenían dos misiones: montar el Hospital de Campaña y, en 72 horas, empezar a recibir pacientes. “Ya habíamos hecho un simulacro en 2021 sobre como montar y desmontar el hospital”, cuenta. El día 13, el centro ya estaba en marcha. “Recibimos a mucha gente herida a causa del terremoto, pero también a gente que necesitaba atención y que se había quedado sin un centro hospitalario de referencia. Getne que había sido operada, mujeres embarazadas preocupadas, controles rutinarios…”, detalla Álvarez. El hospital de campaña es “un minihospital”, y cuenta con áreas de cirugía, obstetricía, pediatría, traumatología o psicología, entre otras. “Una de las cosas más sorprendentes para mí fue ver cómo, a los pocos días de estar abierto, ya funcionaba como cualquier otro hospital. Incluso había gente citada, que venía una vez y tenía que volver para pasar un control”, recuerda el sanitario. Los profesionales trabajaron, mano a mano, con voluntarios que realizaban las tareas de traducción. “Hubo dos españoles que vinieron a traducirnos, y luego también personas que traducían al inglés. Su labor fue importantísima para nosotros. Venían desde zonas muy lejanas para ayudarnos”, valora Álvarez. A la semana de abrir sus puertas, el número de pacientes se había reducido levemente, pero el segundo terremoto lo cambió todo. “El seísmo fue a las ocho de la tarde, desde ahí a las dos de la mañana trabajamos sin parar. Cambió todo: volvió el nerviosismo, el miedo, hubo muertos, muchos heridos. La gente estaba volviendo a sus casas, con preocupación de que volviese a pasar algo, y pasó”, recuerda. El sanitario da cuenta de la difícil situación de la población: “Hay gente que está durmiendo en sus vehículos, donde puede”. El ourensano regresó a casa hace unos días, después de darle el relevo al segundo turno de Start. Pese a la difícil situación de Turquía, reconoce las ganas de volver a colaborar: “Si hubiese la posibilidad de volver, volvería, claro”. Esta es su primera experiencia en terreno, después de sumarse al equipo de emergencia en el año 2017. “Hacía mucho tiempo que quería hacer algo de este tipo, un compañero me habló de este equipo y quise probar”, apunta.