Ourense inauguró las cuentas laborales de 2023 con más desempleados. Así lo constatan los datos publicados ayer por el Ministerio de Trabajo y Economía Social. En concreto, las estadísticas de ocupación sumaron 284 parados más a lo largo del mes de enero, alcanzando de este modo un total de 16.578 personas que carecen de un puesto de trabajo. Esta subida en las cifras del paro empaña, aunque no evita, una buena noticia acerca del balance interanual. Las cuentas respecto a enero de 2022 reflejan que en Ourense hay 619 desempleados menos.
Traducida a porcentaje, la variación anual representa un descenso del 3,6%. Ourense es la provincia gallega en la que menos baja el paro. El descenso en el conjunto de Galicia fue más acusado, del 5,8%, y en el del territorio nacional todavía lo fue más, del 6,9%.
Desde el Ministerio aluden a que la hostelería y el comercio han sido especialmente castigados debido a la finalización de la campaña navideña. En Ourense, igual. Tanto es así que el sector servicios, en el que se integran estas dos ramas, perdió 352 trabajadores en el mes de enero. El resto de sectores cierran el primer mes del año con valores ligeramente buenos aunque casi inapreciables. Se registraron descensos del paro en agricultura (-13), industria (-19) y construcción (-17), así como en el colectivo que carecía de empleo anterior (-19).
La afiliación a la Seguridad Social deja el peor dato de todos los relacionados con el empleo en enero. Las cifras del Ministerio de Trabajo corroboran un gélido bajón de 902 afiliados. Al comenzar febrero, la provincia ourensana contaba con un total de 103.014. Aun con estos malos valores, en comparación con el enero pasado la tendencia es positiva y se registran 697 afiliados más.
La estacionalidad marca la reacción de agentes sociales
La estacionalidad repercute en la subida del paro en enero. El secretario de Estado de Empleo, Joaquín Pérez Rey, valoró que la subida “nunca puede ser una buena noticia”, pero que el mes se comportó en términos “habituales”. Desde la Confederación Empresarial de Ourense (CEO) observaron que los datos “cumplen el patrón”, y señalaron las dificultades de las empresas, provocadas en parte por “el incremento de la fiscalidad y de los costes salariales”. En sindicatos, desde la CIG urgieron a cambiar el modelo productivo por la “cada vez mayor” dependencia del sector servicios, así como a “mejorar las condiciones laborales, salariales y sociales”.
