Vecinos de cuatro parroquias y una urbanización y dos núcleos de Pereiro de Aguiar se quedaron ayer sin agua de la traída debido a la turbidez detectada por la empresa Viaqua en los controles, y que los técnicos esperan resolver en un par de días o incluso antes si es posible..
Como medida preventiva, y tras prohibir el consumo a la población, el Concello de Pereiro de Aguiar repartíó ayer agua embotellada a la población que la necesita para beber o cocinar y que no tenga acceso a este recurso a través de pozos privados. Las parroquias que se quedaron sin agua para consumo humano fueron Melias, Sabadelle, San Salvador y Vilariño, así como los núcleos de Boeiros, Cebreiros y la urbanización de Veiga de Abaixo.
Entre las instalaciones que se quedaron afectadas, están el colegio Ben-Cho-Shey y la Galiña Azul situados en el municipio. El alcalde de la localidad, Luis Menor, atribuyó a las "fortes chuvias da pasada semana e os conseguintes arrastres" el episodio de turbidez, que arrojó niveles no aptos para el consumo humano. Desde la empresa trbajaban ayer en el filtrado y bombeo para subsanar el problema cuanto antes.
Pronta solución
"É unha cuestión conxuntural que esperemos que se solucione nun par de días", añadió Menor, que advirtió de que si continúa "faranse máis entregas de auga". Por la tarde, efectivos municipales repartieron botellas en puntos fijos establecidos en las parroquias afectadas .
