El perfil del delincuente: el 85% son hombres y comienzan jóvenes a robar

La delincuencia en Ourense sí tiene sexo. El 85% por ciento de los detenidos o investigados son hombres frente a un 15% de mujeres, tal como revelan las series anuales del Ministerio del Interior y que permiten elaborar un perfil del infractor por edad y sexo. El número apenas ha variado en la última década (algo más de 2.000 y 300, respectivamente). La diferencia entre ellos y ellas se mantienen también en el ranking de los delitos. Lo que sí demuestra el balance de criminalidad que realiza Interior con datos de la Policía Nacional y la Guardia Civil desde 201 es que el número de mujeres que delinquen o al menos que han sido investigadas por un delito ha ido en ascenso: pasaron de 140 en 2010 a las 316 del último año con datos. Los hombres atentan más contra la seguridad vial (conducir sin carné, más alcohol del permitido o con exceso de velocidad), se inician antes en delitos que atentan contra las personas (desde homicidios a lesiones) y tontean a temprana edad con los robos. Las mujeres están más especializadas en lesiones, hurtos y amenazas o coacciones. “En 2017, tuvimos un caso de una mujer de 40 años que trajo a los comerciantes de cabeza por las sustracciones al descuido en las tiendas; llegó a acumular más de 20 detenciones hasta que ingresó en prisión provisional”, recuerda un policía de la Comisaría. Además, en los últimos años irrumpieron con fuerza dentro de las infracciones viales, superando a las imputaciones por tráfico de drogas dentro de los delitos contra la seguridad colectiva. E igualan casi a los hombres en estafas bancarias (cuatro frente a seis). Pese a que casi nunca matan, en 2021 fue el año de las excepciones, con tres mujeres encarceladas por homicidios (dos vecinas de O Barco inculpadas en la muerte violenta de una amiga y una de Cortegada imputada por el asesinato de un ligue al que conoció por internet). En los más graves, aquellos que atentan contra las personas, sigue prevaleciendo la figura masculina, principalmente por la violencia de género. La edad del delincuente más activo en Ourense se sitúa mayoritariamente entre los 41 y 64 años de edad, una franja en la que no hay diferencia por sexos. También las mujeres delinquen más pasados los 40 años y casi nada cuando son menores de edad (dos en el año 2020). En los delitos contra el patrimonio, las bandas recurren a ellas porque, según asegura un policía, “pasan más desapercibidas”. De hecho, cada vez hay más mujeres en grupos criminales dedicados a asaltar viviendas habitadas. Por contra, los chicos comienzan antes que ellas a delinquir. Principalmente, se inician con los robos y las peleas (41 detenidos en un año frente a solo cuatro mujeres). En el lado opuesto, en la jubilación (más de 64 años), se pasa más por el juzgado que durante la minoría de edad: 159 hombres fueron arrestados en un año, sobre todo por delitos contra la libertad (amenazas, coacciones, malos tratos habituales) e infracciones viales. En esa franja, el tráfico de drogas, contrariamente a lo que ocurre en otras provincias como Pontevedra, es anecdótica (tres investigados). EN PRISIÓN Mientras que los robos y el tráfico de drogas son los delitos por los que más mujeres acaban en prisión, el abanico es más amplio para los varones por la violencia de género y la seguridad vial. La franja de edad con más presos es la que va de los 41 a 60 años .