El plan situaba estos parkings en el barrio de A Ponte, en lo que será la futura variante norte, la zona universitaria, el recinto de Expourense, el acceso centro y el barrio de O Couto.
La implantación de aparcamientos disuasorios en el Concello de Ourense también se ha estancado en los últimos años, concretamente el plan sectorial lanzado por la Xunta, que lleva tres años paralizado. Esta iniciativa contemplaba la construcción de seis estacionamientos disuasorios en puntos estratégicos de la ciudad para paliar la falta de plazas en el centro y potenciar el transporte público.
En concreto, el plan situaba estos parkings en el barrio de A Ponte, en lo que será la futura variante norte, la zona universitaria, el recinto de Expourense, el acceso centro y el barrio de O Couto. Todos ellos debían aportar a Ourense alrededor de un millar de plazas.
El Plan Xeral de Ordenación Municipal, actualmente en tramitación, también recoge un aparcamiento grande en el enlace de A Casilla y otros más pequeños en San Francisco, rúa Río Mao, O Couto o avenida Otero Pedrayo.
Promesas
Partidos políticos del Concello también llevaban en sus programas promesas relacionadas con esta problemática. Democracia Ourensana apostó por la construcción de aparcamientos públicos, Ourense en Común por más disuasorios y bajada de tarifas en los parkings subterráneos.
