La falta de un acuerdo entre Aquagest y la comisión vecinal que se formó en Punxín contra la subida del coste del agua y en defensa del adecuado estado sanitario de la misma ha provocado una propuesta de la Alcaldía para rescindir el contrato con dicha empresa. Es una decisión que toma el alcalde, Manuel Vázquez, de mutuo acuerdo con Aquagest, que fue la concesionaria de la gestión del servicio público de abastecimiento de agua potable y del saneamiento desde el mes de diciembre de 2009.
El pleno en el que se aprobará esta resolución está previsto para mañana al mediodía y en esta sesión, igualmente de acuerdo con una propuesta de la Alcaldía, también se regulariza una comisión de gestión mixta formada por concejales y miembros de la comisión de aguas que emprendieron la protesta, con vistas a que se haga cargo del seguimiento del acuerdo que adopte la Corporación municipal en relación a la posibilidad de realizar una nueva adjudicación del servicio o que sea el propio Concello quien lo asuma.
Los vecinos insisten en que las malas condiciones del agua se agravan con el paso del tiempo pues tras solucionar con una depuradora el problema del arsénico detectado en Ourantes, hace tres meses que ya no es apta para el consumo en Vilar y ayer se colocaba el último cartel de advertencia en Ventosela.
Los vecinos insisten en que las malas condiciones del agua se agravan con el paso del tiempo pues tras solucionar con una depuradora el problema del arsénico detectado en Ourantes, hace tres meses que ya no es apta para el consumo en Vilar y ayer se colocaba el último cartel de advertencia en Ventosela.
